Leptopirosis

Es una enfermedad infecciosa producida por una bacteria llama Leptospira interrogans y sus diferentes variedades. Puede afectar tanto a los animales como al hombre por lo que se la considera una zoonosis.

 La infección es común en las ratas y también en animales domésticos como vacas, caballos, cerdos y perros. La presentación en los gatos en mucho más rara. Puede suceder que los animales infectados no muestren síntomas evidentes durante el análisis clínico, pero son capaces de eliminar las bacterias al ambiente a través de su orina.

¿Cómo se transmite?

La gente corre riesgo de enfermarse de leptospirosis cuando tiene contacto con aguas, alimentos o suelos contaminados con la orina de animales infectados con leptospiras. Este microorganismo puede entrar a un individuo por contacto directo a través de heridas en la piel, al tomar agua o ingerir alimentos contaminados o bien en forma de aerosol a través de los ojos o la nariz. También puede contagiarse en forma indirecta al caminar descalzos en lugares donde orinaron animales infectados. Existen personas que tienen mayor riesgo de contagio como los trabajadores de los arrozales, cañeros, mataderos, cuidadores de animales y veterinarios. La transmisión de persona a persona es rara. La condiciones ambientales de humedad y alta temperatura son favorables para el desarrollo de brotes de leptospirosis.

Síntomas

En su primera etapa, los síntomas de leptospirosis son similares al de una gripe con fiebre, dolores de cabeza y de músculos, escalofríos, conjuntivitis, náuseas, vómitos, diarrea. Algunos enfermos pueden no presentar síntomas. Si no es tratada a tiempo, puede dañar los riñones, el hígado, causar problemas respiratorios e inflamación de la membrana que cubre el cerebro y la médula espinal (menengitis). En algunos casos puede ser mortal.

Control y prevención

1.- Eliminación de roedores y de los basurales a cielo abierto o de las condiciones ambientales que puedan favorecer su proliferación.

2.- Relleno de terrenos bajos donde puedan formarse cuerpos de aguas estancadas.

3.- Evitar nadar o tomar contacto con lagunas, arroyos o espejos de agua que pudieran estar contaminados con la leptospira.

4.- Implementar campañas de educación para la salud donde se informe a la población sobre la leptospirosis.

Existen vacunas para perros y otros animales domésticos. En el primer caso deben aplicarse cada seis meses y utilizar vacunas con la variedad de leptospira que predomina en cada área afectada. En algunos países se han implementado campañas de vacunación en humanos para grupos de riesgo.