Es una inflamación del hígado que puede tener diversas causas, destacándose la infección por virus. Existen 3 clases distintas de infección:
El tipo A que se contagia por vía digestiva (la llamada vía fecal-oral), alimentos, aguas o heces contaminados.
Los tipos B y C, que se transmiten por transfusiones de sangre o por contacto sexual.
SÍNTOMAS
Puede darse sin síntomas o simulando un estado gripal, con decaimiento, postración importante, pérdida de apetito, nauseas y vómitos y fiebre en general no superior a 37,5° C.
El tipo A produce ictericia (coloración amarilla en la piel) y en algunos casos una coloración oscura en la orina. En el tipo B esto sólo se presenta en un 20% de los casos.
FACTORES QUE FAVORECEN EL CONTAGIO
• Higiene defectuosa
• Promiscuidad
COMPLICACIONES
Si no se trata la hepatitis, puede pasar a la cronicidad y desembocar en cuadros hepáticos más severos.
¿COMO EVITAR EL CONTAGIO O LA PORTACIÓN DE VIRUS?
• Higiene personal cuidadosa, en especial después de ir al baño.
• Saneamiento ambiental, agua corriente, cloacas.
• Vacunación: existen vacunas para los virus A y B, así como para los dos juntos.
QUIENES PUEDEN CONTAGIARSE
En principio todos. De allí el cuidado riguroso en las medidas higiénicas.
Deben extremar las precauciones especialmente, el personal de guarderías, establecimientos para niños y trabajadores del área de educación y salud.
LAVESE LAS MANOS CON JABON SOLIDO O LIQUIDO.
• Toda vez que deba atender un bebé.
• Después de utilizar el baño.
• Antes de preparar los alimentos.
• Después de tareas en las que ha manipulado aguas servidas o ropas contaminadas (orina, materia fecal)