Convencional: Melón

El melón (Cucumis melo) es una planta herbácea monoica de tallos rastreros. Se cultiva por su fruto, una baya de temporada veraniega con un gran contenido de agua y de sabor dulce.

La planta posee tallos blandos y pilosos que crecen a ras de suelo. Sus hojas tienen peciolo acanalado y son palmadas, es decir, su aspecto es semejante al de una mano. Las flores son amarillas y cada una tiene un solo sexo.
La forma del fruto va desde esférica hasta elipsoidal. En los llamados melones plátano existen ondulaciones que los hacen parecer una calabaza. Su tamaño es dependiente de la variedad y de las condiciones de cultivo. De este modo, hay melones pequeños que pesan alrededor de 400 g y otros muy grandes que pueden pesar 20 kg o más. En las variedades más usadas, habitualmente los pesos fluctúan entre más de medio kilo y menos de cinco.
El color de la epidermis y de la pulpa es variable según el grupo. La epidermis puede ser blanca, gris, verdosa o amarilla y de textura lisa, rugosa o reticulada. La pulpa es aromática, con textura suave y diferentes colores: amarillo, verde, rosado y tonos intermedios. En el centro hay cavidad que contiene muchas semillas recubiertas de una sustancia pegajosa.

Propiedades del melón
El fruto, muy acuoso, es anual-, las flores machos y hembras se polinizan de modo natural o manualmente para que produzcan su fruto grande y jugoso.
El melón, rico en vitaminas B y C, es menos ácido que la mayoría de las frutas y da muy buenos resultados para mascarillas faciales.
El melon es una de las frutas mas saludables y bajas en calorias, por ello resulta sumamente apropiado para menus de dietas de adelgazamiento. Es refrescante, jugoso y con una pulpa dulzona que armoniza muy bien con sabores salados y resulta muy apropiado para formar parte de muchos platos de nuestra dieta. Su contenido en azúcar es muy bajo y además de ser un buen remedio para combatir la sed, dada su riqueza en agua, supone una buena fuente de potasio y de vitaminas, aporta además fósforo, magnesio y calcio.
También se hace una exquisita crema limpiadora a base de melón que resulta de gran frescor, así como un hidratante suave; ambos preparados van bien a todo tipo de pieles.

Almacenamiento de melones después de la cosecha
La temperatura óptima de conservación es de 2,2 – 5°C, tolerando un almacenamiento de 7 a 10 días, con una Humedad relativa alta ( 90 -95%) para prevenir la deshidratacion.
Un rápido enfriado inmediatamente después de la cosecha es esencial para conservar una calidad óptima postcosecha.
 
Variedades de melón
Tipo Honey Dew o Rocío de Miel:
Es el más usado comercialmente en la Argentina, siendo de muy buena aceptación por el consumidor.
Existen diversas variedades que se caracterizan en general, por tener frutos casi esféricos, grandes, pulpa verde claro muy dulce y jugosa, con piel lisa, firme y buena adaptación al transporte, con una adecuada conservación de poscosecha.
Las principales variedades de polinización abierta utilizadas son: Honey Dew, Tam Dew Improved, Honey Dew Green Flesh. Se han obtenido híbridos que se caracterizan por su precocidad (85-90 días), uniformidad de frutos, altos rendimientos y producción concentrada, tales como Early Dew y Moonshine. Otros híbridos son: Takii HD Nº1 , Takii HD Rock, RML 2704 y Honey King.
 
Tipo Amarillo:
Las variedades de este grupo tienen frutos más o menos alargados, con un peso promedio de 1,5 a 2,5 Kg. La pulpa es de color blanco cremosa, presentando en la zona de la cavidad seminal una tonalidad anaranjada.
La corteza es amarillo brillante, con un arrugado longitudinal más o menos marcado según la variedad considerada, siendo en algunas lisa. Tiene buen com­portamiento al transporte y en poscosecha.
Las variedades más usadas son: Amarelo, June Canary, Yellow Canary, Jamaica Precoz, Filadelfia, Dorado, Tesoro dulce, Canary Prince y Gold King.

Tipo Escrito o Reticulado:
Es poco usado en Argentina, sin embargo es el más consumido en Estados Unidos.
La corteza es lisa con un reticulado corchoso más o menos superficial que cubre todo el fruto. El tamaño de los frutos es mediano 1,2 a 2,0 Kg., de forma redondeada o ligeramente ovalada. La pulpa es gruesa y de color anaranjado, con una cavidad seminal reducida.
Algunas variedades usadas son: Planter’s Jumbo, Hale’s Best Jumbo, Topmark e híbridos como Topscore, Hiline, Mission, Ga­lleon, Primo, Magnum 45.

Tipo Galia:
Es de origen israelí, parece ser un híbrido entre el melón reticulado y algún otro. En Argentina no ha tenido gran difusión pero si en el mercado europeo. Los frutos son esféricos, con cáscara fina, amarillenta anaranjada a la madurez, algo reticulada, su pulpa es de color blanco verdoso, muy dulce y aromática.
El peso de los frutos es de 1-1,3 Kg. y deben cortarse de la planta, a diferencia de los del tipo reticulado. Estos frutos tienen poca capacidad de con­servación, excepto aquellos híbridos recientes que han incorporado la característica de » Larga vida».
Algunas de las variedades usadas son Gallicum, Galia, Golan.

Tipo Charentais:
El Norte de Europa principalmente le da un amplio uso a este tipo de melón, siendo Francia el país que más lo cultiva.
La pulpa es de color salmón. Los frutos son bastante aromáticos y en general este tipo se caracteriza por no tener buena conservación. Los híbridos obtenidos últimamente han mejorado este defecto y tienen buen comportamiento en la manipulación y transporte.
Los frutos son de piel lisa o reticulada y de color verde claro algo grisácea, de tamaño mediano a chico (0,5 a 1,5 Kg.), globosos, ligeramente deprimidos en sus extremos, acostillados. Como ejemplo de este grupo se pueden citar a Charentais, Doublon y Alpha e híbridos como Cantos, Pancha y Siván.