Spanakopita o pastel griego de espinacas

El nombre de esta verdura deriva de la palabra spina pues cuando sus frutos están maduros se presentan armados de espinas. En España se consume desde el siglo XI, cuando fue introducida por los árabes. En el siglo XV su cultivo se extendió por toda Europa, de ahí pasó a América, aunque no fue hasta la década de 1920 cuando se descubrieron sus magníficas propiedades nutricionales.

La espinaca es muy apta para la congelación, lo cual permite comprarlas durante todo el año pues conservan completamente sus propiedades originales. Si se compran frescas hay que escoger las que tengan hojas tiernas, de color verde, brillante y uniforme. Para congelarlas primero hay que escaldarlas y dejarlas escurrir.
Las espinacas pueden consumirse tanto crudas como cocinadas. Si son frescas, debemos lavarlas muy bien para eliminar posibles restos de tierra y hojas en mal estado. Pueden cocinarse al vapor, hervidas, fritas, salteadas, etc. Están deliciosas para acompañar tanto carnes como pescados, puden cocinarse en tortilla, menestra, cremás de verduras, lo cierto es que las posibilidades son infinitas, incluso crudas cuando son muy tiernas son ideales para servirlas en ensaladas.

Ingredientes
Para 6 personas
• Masa filo láminas 10
• Diente de ajo 2
• Aceite de oliva virgen extra 130 ml
• Espinaca fresca 900 g
• Queso feta 200 g
• Huevo 1
• Pimienta negra molida
• Tomillo seco para espolvorear

Cómo hacer spanakopita o pastel griego de espinacas, pasas y queso feta
Dificultad: Media
• Tiempo total 45 m
• Elaboración 20 m
• Cocción 25 m

En una cacerola amplia con un poco de aceite de oliva virgen extra, dorar los dientes de ajo picados. Añadimos las espinacas, salpimentamos al gusto y rehogamos un par de minutos. Escurrimos bien las espinacas y atemperamos. Batimos el huevo en un recipiente hondo junto con el queso feta desmenuzado y las uvas pasas. Añadimos las espinacas escurridas y mezclamos. Pincelamos una lámina de masa con aceite de oliva. Colocamos otra lámina encima y engrasamos de nuevo. Podemos usar una tercera lámina, pero esto es opcional. Colocamos una parte del relleno de espinacas sobre el extremo más largo de la masa filo y envolvemos en forma de cilindro. Colocamos en el centro de un molde redondo, enrollado sobre sí mismo. Preparamos más cilindros de masa filo y enrollamos alrededor hasta cubrir toda la superficie del molde, formando una espiral. Pincelamos con aceite de oliva y cocemos en el horno, precalentado a 180º C, durante 20-25 minutos o hasta que esté bien dorado. Espolvoreamos con tomillo seco a la hora de servir.
Fuente: https://www.directoalpaladar.com/ingredientes-y-alimentos/temporada-espinaca-no-te-pierdas-estas-siete-recetas-para-aprovecharla-estan-deliciosa