Zoroastrismo

Zoroastrismo

Los persas del mundo antiguo entendían que sus vidas estaban guiadas por un ser supremo, Ahura Mazda, cuyas enseñanzas fueron conocidas a través del Profeta Zoroastro.

En una primera etapa los persas veneraban a una pluralidad de dioses que imponían el orden en el universo, así como a los elementos de la naturaleza (el aire, el agua, el fuego y la tierra). Con posterioridad se consolidó la creencia de un único dios supremo.
Aspectos fundamentales del Zoroastrimo
El Zoroastrismo (también conocido como Mazdeísmo) surgió en Persia, la actual Irán, hacia el siglo Vl a.C y, por lo tanto, es una religión monoteísta anterior al cristianismo, al Islam y al judaísmo.
Es una religión que propugna una vida basada en los buenos pensamientos, las buenas acciones y en la libertad del ser humano para elegir entre el bien y el mal. Cuando el hombre alcance la otra vida tendrá que rendir cuentas de sus acciones ante Ahura Mazda.
Según el zoroastrismo el mundo es como un escenario en el que el bien y el mal se enfrentan permanentemente y el destino de cada persona depende de su elección entre las fuerzas del bien o las del mal. La tensión permanente entre ambas fuerzas proviene del enfrentamiento previo entre Ahura Mazda y su rival Angra Mainyu (el equivalente al demonio en la tradición cristiana).
La ley Eterna o Daena expresa el verdadero orden del universo y dicho orden es conocido por la humanidad a través de las enseñanzas del profeta Zoroastro.
Con respecto a las enseñanzas morales, el zoroastrismo propugna la igualdad de todos los seres humanos, el respeto a la naturaleza y a todas las formas de vida y un comportamiento basado en la caridad y la lealtad.
Los textos sagradas están recogidos en la Avesta, una colección de himnos en los que se pueden encontrar cantos litúrgicos (los gathas), los cuales son atribuidos a Zoroastro.
El zoroastrismo es una religión que todavía se practica en nuestros días
Se profesa en algunas regiones de la India y en una parte del actual Irán. Se calcula que unas 200.000 personas siguen sus enseñanzas y ritos.
Los creyentes que profesan el zoroastrismo siguen venerando el fuego como símbolo que representa la idea de eternidad y al propio Ahura Mazda.
El rito funerario es otra de las señas de identidad que todavía se mantiene entre sus fieles. Al considerarse que los cadáveres humanos son impuros, los cuerpos no son enterrados ni incinerados, por lo que son enviados a las denominadas «torres del silencio», una edificación en la que los cadáveres son depositados hasta que son consumidos y finalmente los huesos son depositados en un osario situado en la torre funeraria.
Fuente: https://significado.com/zoroastrismo/