Metáfora

La metáfora es una figura literaria o retórica con la cual se atribuye el significado de un concepto a otro, estableciendo entre ambos una analogía.

Dicho de otro modo, la metáfora intercambia los conceptos evidenciando entre ellos la semejanza.
Su uso permite imprimir mayor belleza, gracia o trascendencia a lo que se desea expresar. Esta figura tiene aplicación tanto en la literatura como en el lenguaje cotidiano.

50 ejemplos de metáforas

Metáforas en el lenguaje cotidiano (y su significado)
1. Las perlas de tu boca. (Los dientes de tu boca)
2. Las luciérnagas celestes decoraban la noche. (Las estrellas brillaban en la noche)
3. El cielo estaba cubierto de blancos algodones. (El cielo estaba cubierto de nubes)
4. Se escuchaba el murmullo del río. (Se escuchaba el sonido del río)
5. Una madre da la vida por sus retoños. (Una madre da la vida por sus hijos)
6. La niña se hizo una mariposa. (La niña se desarrolló)
7. El oro de sus cabellos. (El color dorado de sus cabellos)
8. Admiraba el ébano de su piel. (Admiraba el color oscuro de su piel)
9. El manto verde de la pradera. (La hierba de la pradera)
10. El sueño eterno. (La muerte)
11. La flor de la vida. (La juventud)
12. Más allá de la tierra solo hay azul. (Más allá de la tierra solo hay mar)
13. Déjame probar la miel de tus labios. (Déjame probar el sabor de tus labios)
14. De sus ojos brotaban ríos de amargura. (De sus ojos brotaban lágrimas de amargura)
15. La nieve en sus cabellos hablaba de su historia. (Las canas en sus cabellos hablaban de su historia)
16. El marfil de su cuerpo lo seducía. (El blanco de su cuerpo lo seducía)
17. Se sentía el tambor de su pecho. (Se sentía el latido de su pecho)
18. Dos esmeraldas brillaban en sus ojos. (Sus ojos verdes brillaban)
19. Se escuchaba el lamento de las guitarras. (Se escuchaba el sonido de las guitarras)
20. Sus ojos eran dos pozos azules. (Para referir al color y belleza de los ojos de alguien)
21. Su boca era un fruta fresca. (Su boca era roja y provocativa)
22. El amor es un tirano. (El amor no da cabida a elección)
23. Tu voz es música para mis oídos. (Tu voz es agradable para mí)
24. Su corazón era un pozo infinito. (Su capacidad de amar es interminable)
25. Sus ojos son zafiros. (Sus ojos son azules y brillantes)
26. Su piel es terciopelo. (Su piel es suave)
27. Lucrecia es una fiera. (Lucrecia tiene mal carácter)
28. Tus brazos son puerto seguro. (Tus brazos me hacen sentir protegido y descansado)
29. La imaginación es la loca de la casa. (Atribuido a Santa Teresa de Ávila). (La imaginación inquieta pero forma parte de nosotros)
30. Sus discípulos, brotes de olivo, crecían por doquier.
31. Tu piel, seda perfumada.
32. La luna, lámpara de la noche.
33. Escuchar su voz, un bálsamo para mi alma.
34. Tenía los nervios de acero.
35. Nada conmovía su corazón de piedra.
36. En el cielo brillaba la luna de plata.
37. Entonaba con su voz de canario.
38. No era un diluvio, era su llanto.
39. La ciudad, remolino del caos, estruendo infatigable.
40. Sus ojos eran luceros; los luceros eran esperanzas; las esperanzas, caballos que llevaban el carro de este amor.
Vea también:
Metáforas en la literatura (explicadas)
41. «Su luna de pergamino / preciosa tocando viene» (Federico García Lorca).
Explicación: se trata de una metáfora pura, en la que se ha sustituido un término real por uno irreal. La luna de pergamino se refiere a una pandereta.
42. «Cuando pienso cómo mi luz se agota…» (John Milton).
Explicación: metáfora pura. La luz que se agota se refiere a su ceguera.
43. «Al molino del amor / alegre la niña va» (Tirso de Molina).
Explicación: se trata de una metáfora de complemento preposicional en la que se asocian dos términos a través de la preposición del: «al molino del amor».
44. «Si al imán de tus gracias atractivo / sirve mi pecho de obediente acero, / ¿para qué me enamoras lisonjero, / si has de burlarme luego fugitivo?» (Sor Juana Inés de la Cruz).
Explicación: metáfora de complemento preposicional en el primer («de») y segundo («de») verso: «al imán de tus gracias atractivo», «mi pecho de obediente acero»
45. «Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos, / te pareces al mundo en tu actitud de entrega. / Mi cuerpo de labriego salvaje te socava / y hace saltar el hijo del fondo de la tierra» (Pablo Neruda).
Explicación: el primer verso contiene una metáfora aposicional en la cual los términos de comparación aparecen separados por comas: «Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos». El tercer verso es una metáfora de complemento preposicional: «Mi cuerpo de labriego salvaje te socava».
46. «Mientras por competir con tu cabello, / Oro bruñido, el sol relumbra en vano» (Luis de Góngora).
Explicación: Esta es una metáfora aposicional donde la coma establece la aposición que semeja el oro al sol: «Oro bruñido, el sol relumbra en vano».
47. «Tus ojos son la patria del relámpago y de la lágrima» (Octavio Paz).
Explicación: la primera parte de la frase es una metáfora impura, en la cual se establece una identificación entre el concepto real (tus ojos) y el imaginario (la patria del relámpago y de la lágrima) por medio del verbo ser (son). La segunda parte de la frase es una metáfora de complemento preposicional: «la patria del relámpago y de la lágrima».
48. «Mi corazón es un geranio detenido» (Sylvia Plath).
Explicación: se trata de una metáfora impura donde se asocia mediante el verbo ser (es) al corazón con un geranio detenido.
49. «Esos golpes sangrientos son las crepitaciones / de algún pan que en la puerta del horno se nos quema.» (César Vallejo).
Explicación: es una metáfora impura. En ella se semeja a los golpes sangrientos con las crepitaciones de algún pan que en la puerta de un horno se nos quema.
50. «Tus manos son mi caricia, / mis acordes cotidianos» (Mario Benedetti).
Explicación: estos versos reúnen una metáfora impura (tus manos son mi caricia), con una metáfora aposicional (tus manos son mi caricia, mis acordes cotidianos).
Fuente: https://www.significados.com/ejemplos-de-metaforas/