Tragar el paquete

Durante mucho tiempo, en España los cigarros puros se expendían en «atados» (y nunca mejor aplicado el término, debido a que estaban liados con una cinta) de seis unidades.

Al encontrarse desprovistos de cualquier envoltorio, permitía al consumidor examinar minuciosamente el producto antes de comprarlo (observar el color, oler su aroma, contar las unidades…). Pero, sucedió que un buen día, la Compañía Arrendataria de Tabacos resolvió anular este sistema y ofrecer los cigarros guardados en estuches que mostraban el contenido sólo a través de una pequeña abertura. La innovación causó gran desagrado entre los fumadores, lo que motivó que se pusiera de moda la frasetragar el paquete, con la que se daba a entender que al usuario no le quedaba otra alternativa que aceptar como bueno -aunque no lo fuese- el tabaco empaquetado. El dicho se extendió luego al uso general, justificando toda actitud arbitraria e inconsulta.

Fuente: http://www.ciudad-real.es/varios/dichos/t.php