Con el amigo incierto, un ojo cerrado y el otro abierto

Procede este refrán de una fábula clásica, cuya protagonista la zorra invita a dormir al mochuelo, comprometiéndose a velarle el sueño.

Finge acceder el mochuelo pero cerrando y abriendo alternativamente un ojo; como aquélla manifestó su extrañeza por este modo de proceder, el mochuelo la dijo: Con el amigo incierto, cerrado un ojo y el otro abierto.

Fuente: http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/origen-de-algunos-refranes/html/