Cómo cuidar una piel con dermatitis atópica

Piel seca, enrojecida y con picor… La dermatitis atópica es cada vez más frecuente: afecta al 10% de la población, tanto a niños como a adultos.

Cuidar la piel atópica, incluso cuando no hay síntomas, es clave para alejar nuevos brotes.

1 / 10 Lo primero, reconoce los síntomas

Así puedes Identificar las señales que te manda tu piel:
• Lo más habitual es sentir la piel seca, rugosa, escamosa, enrojecida y con picor. Pero tampoco es raro ver cambios en la dermis en forma de ampollas que pueden supurar y llegar a formar costras. Es muy importante evitar rascarlas para no rpovocar heridas y prevenir el riesgo de infección.
• La erupción suele aparecer en las zonas de flexión, como la parte interna de los codos y detrás de las rodillas. Pero se puede extender a otras zonas como el cuello, la cara, las manos y los pies.

2 / 10 Hidrata la piel de cara y cuerpo a diario

Si en una piel sana ya es importante la rutina diaria de hidratación, en la pieles atópicas es todavía más necesario porque se trata de pieles muy secas, incluso con tendencia a agrietarse.
• Los expertos aconsejan utilizar cuidados específicos para pieles atópicas que nutren en profundidad y protegen la barrera cutánea de este tipo de pieles.
• Recuerda que si guardas la crema en la nevera, el efecto frío puede ayudarte a aliviar el picor.

3 / 10 Usa jabones con pH neutro

Estos productos benefician el cuidado de la piel sensible. Y si se trata de niños, se aconseja directamente utilizar productos que no contengan jabón, ya que nuevamente tienden a resecar demasiado la piel.
• Recuerda que cualquier producto de higiene que utilices debe ser hipoalergénico y sin perfumes.
• En cuanto a los cosméticos, asegúrate de que no contengan alcohol ni parabenos. Y utilizatambiénmaquillajeshipoalergénicos.

4 / 10 Utiliza prendas 100% de algodón

Las lanas y fibras sintéticas propician la aparición de lesiones cutáneas.
• Se recomienda elegir prendas de algodón y evitar los sintéticos y las lanas que tienden a provocar reacciones alérgicas en la piel.
• Además, a la hora de lavarlos, se aconseja un doble aclarado para eliminar totalmente los restos de detergentes.
• No se recomienda el uso de suavizantes.

5 / 10 Evita los baños o duchas prolongados

Es importante que la ducha sea corta y con el agua no muy caliente, ya que favorece la aparición de las lesiones porque daña la barrera cutánea.
• Dúchate solo una vez al día con el agua templada y sécate suavemente, sin restregar la toalla.
• Y recuerda que el mejor momento del día para aplicar la crema hidratante es justo después del baño, cuando la piel está todavía húmeda. Se absorben mejor los principios activos del producto y «dura más».

6 / 10 Aleja el estrés

Los enfados frecuentes, las situaciones de frustración, nerviosismo, estrés o en las que se pasa vergüenza son factores que predisponen a la aparición de brotes.
• Puedes recurrir a técnicas de relajación para controlar estos estados.
• Realizar varias respiraciones abdominales profundas en momentos de tensión puede ayudarte a liberar el estrés.

7 / 10 Evita alimentos que aumenten los síntomas

Aunque la dermatitis atópica no es una alergia, está demostrado que algunos alimentos pueden favorecer que se desencadene un brote.
• Leche, huevos, cítricos, frutos secos (sobre todo, cacahuetes y nueces), soja, marisco, chocolate, fresas o trigo son algunos de ellos.
• Una manera de descubrir si te afecta algún alimento es analizar qué comiste antes de sufrir un brote. Para ello, cuando detectes cambios, molestias o erupciones en la piel, apunta en una libreta qué comiste.

8 / 10 Incluye otros que te ayudan a controlar los brotes

Para mejorar los síntomas de la dermatitis atópica, los expertos recomiendan llevar una dieta dieta rica en sustancias que mejoran el estado de la piel:
• Grasas omega 3 (salmón, atún, aceites vegetales) ya que evitan la sequedad cutánea. De hecho se cree que una de las causas de la dermatitis puede ser una deficiencia de omega 3.
• Vitamina A (zanahorias, calabaza, melón o sandía) que es esencial para tus defensas y la formación de proteínas cuya carencia agrava la piel seca.
• Vitaminas E o C (aguacate, aceite de oliva, brécol y kiwis), son antioxidantes y saludables para la piel.

9 / 10 Mantén un ambiente húmedo en casa

El clima seco aumenta la posibilidad de tener piel atópica.
• Por eso las personas que sufren esta afección suelen experimentar una mejoría en los síntomas y el aspecto de la piel cuando se trasladan a zonas con un clima húmedo, por ejemplo cuando van de vacaciones a la costa.
• Evita los contrastes entre interior y exterior moderando el uso del aire acondicionado o la calefacción, y coloca humidificadores en casa.

10 / 10 ¿Existe algún tratamiento?

La dermatitis atópica es una enfermedad crónica, por lo que no se puede curar. La persona que la sufre una vez la padecerá de por vida.
• Al parecer existe un patrón genético y hereditario que hace que en algunas familias sea más frecuente esta afección.
• Se sospecha que ocurre por una carencia de proteínas y una disminución en la concentración de ácidos grasos esenciales en la piel, lo que hace que aumente su sensibilidad, pero aún se desconoce por qué sucede exactamente.
• En brotes agudos puede ser necesario tomar corticoides, antibióticos o antihistamínicos, pero siempre bajo prescripción médica.

TRES IDEAS FALSAS SOBRE LA DERMATITIS ATÓPICA
1. Es contagiosa. La atopia no es una enfermedad infecciosa, por lo tanto no nos la puede contagiar nadie ni nosotros podemos «pegársela» a los demás, ni siquiera teniendo contacto físico estrecho.
2. Es un simple eccema. A veces ambos términos se emplean indistintamente, pero lo cierto es que la dermatitis atópica es un tipo de eccema más severo y crónico que el resto.
3. Solo afecta a las personas alérgicas. Es verdad que la piel atópica suele aparecer en personas con alergias estacionales o con asma, pero no es necesario ser alérgico para desarrollarla. Simplemente, quienes tienen alguna alergia son más propensos a sufrirla.

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Sin embargo, esto no quiere decir que los síntomas sean permanentes, ya que puede haber periodos en los que esté libre de lesiones.
Con las precauciones y cuidados que antes te hemos explicado, se pueden reducir bastante la frecuencia y la intensidad de los brotes, consiguiendo un buen control de la enfermedad.
Por otro lado, aunque no existe ningún fármaco que cure la piel atópica, las cremas y lociones específicas para esta afección consiguen aliviar los síntomas al reducir la hinchazón de la piel, disminuir el picor y mejorar su aspecto de sequedad y descamación.
Fuente: https://www.sabervivirtv.com/dermatologia/dermatitis-atopica_364/1