Bruxismo

Gran cantidad de personas sufren este trastorno, sin saber que lo padecen. Generalmente se descubre cuando vamos al odontólogo a hacernos curar alguna dolencia bucal, o cuando vamos a hacernos un chequeo del estado de la dentadura. Si lo sufrimos podemos prevenir mayores daños. A aflojar la mandíbula, y a informarse sobre esta dolencia tan común.

DESCRIPCIÓN:

Es el trastorno que consiste en apretar o rechinar los dientes durante el sueño. La excesiva fuerza de la contracción muscular provoca dolor y contractura el entorno de la articulación temporomaxilar. Afecta a aproximadamente un 15% de las personas. Puede ser un episodio leve y ocasional o un hábito frecuente y violento que repercute negativamente en los dientes. Ocurre con mayor frecuencia en la primera parte de la noche.

CAUSAS:

En algunos casos, puede deberse a una oclusión anormal de los dientes: el modo en que los dientes superiores encastran con los inferiores cuando la persona cierra la boca. Con mayor frecuencia, este trastorno se debe a problemas de ansiedad, tensión y enojo reprimido. El consumo de alcohol empeora los episodios de bruxismo.

SÍNTOMAS:

Rechinar de dientes durante el sueño. Fuerte tensión muscular en las mandíbulas, que puede provocar dolor en las mismas mandíbulas o en el oído. Puede producirse una anormal alineación de los dientes.

DIAGNÓSTICO:

El examen médico puede eliminar otras causas.

TRATAMIENTO:

El objetivo es tratar de prevenir daños permanente en las piezas dentales y reducir el dolor. Dado que las tensiones nerviosas y el estrés provocan esta manifestación, es conveniente pedir consejo profesional para poder controlarlas. Diversas técnicas de relajación pueden ser muy beneficiosas. Se puede recurrir a correcciones de la mordida por técnicas de ortodoncia. También existen dispositivos protectores que evitan que los dientes se dañen.