Bocio

El bocio es una agrandamiento de la glándula tiroides que produce en el cuello una tumefacción. Existe el bocio simple y el de tipo endémico. Muchas son las causas que producen esta enfermedad, pero también existen buenas chances de atacarlo con diferentes tratamientos. Como siempre es importante un buen diagnóstico de nuestro médico de confianza. Mientras llamamos al doctor, todo lo que debemos saber sobre el bocio.

DESCRIPCIÓN:

Es un agrandamiento de la glándula tiroides que produce en el cuello una tumefacción que no responde a una inflamación ni a un cáncer.

CAUSAS:

El bocio simple se presenta cuando la glándula tiroides no puede producir suficiente cantidad de hormonas para satisfacer las demandas metabólicas del organismo. Se compensa esta deficiencia aumentando su tamaño para poder sintetizar más hormonas. El bocio simple puede clasificarse como endémico (siempre presente en una comunidad) o esporádico. El de tipo endémico es causado generalmente por bajo consumo de iodo en zonas en las que la tierra tiene poca concentración de este elemento. El bocio esporádico se debe al consumo de grandes proporciones de ciertos alimentos o drogas bociógenas que disminuyen la producción de hormonas tiroideas (repollo, porotos de soja, duraznos, frutillas, espinaca y rabanitos). El consumo excesivo de iodo también produce bocio.

SÍNTOMAS:

El agrandamiento de la tiroides puede revelarse en pequeños nódulos o hasta en una masa que sobresale a nivel del cuello y puede producir dificultades respiratorias por compresión de la tráquea, dificultades para tragar por compresión del esófago, o distensión de las venas del cuello que puede provocar mareos cuando se levantan los brazos por encima de la cabeza. Dado que el agrandamiento de la tiroides puede acompañarse de baja producción de hormonas tiroideas (en casos de deficiencia de iodo) o con aumento de los niveles de las mismas (como en la enfermedad de Graves, un tipo de hipertiroidismo autoinmune), el bocio puede presentar síntomas de hipotiroidismo o de hipertiroidismo. En el hipertiroidismo hay una aumento de la frecuencia cardíaca, palpitaciones, ojos saltones, nerviosismo, aumento de apetito, pérdida de peso e hipertensión. En el hipotiroidismo el pulso es lento, se sufre excesivamente el frío, hay aumento de peso, estreñimiento, caída de cabello, párpados caídos y piel áspera y engrosada.

DIAGNÓSTICO:

Se detecta por una ecografía de tiroides o centellograma de tiroides. Los análisis de sangre pueden revelar valores de TSH (hormona hipofisaria que estimula la tiroides) normales o altos, niveles de T4 normales o bajos, captura de iodo normal o elevada. En el análisis de orina los niveles de excreción de iodo pueden ser bajos.

TRATAMIENTO:

La terapia con hormonas tiroideas inhibe la hormona estimulante de la tiroides (TSH) y permite que la glándula tiroides se recupere. Las deficiencias de iodo se tratan con pequeñas dosis de ioduro de potasio y se eliminan, si fuera necesario, los alimentos bociógenos. Si un bocio masivo no responde al tratamiento médico o está causando muchos trastornos para respirar o tragar, se puede requerir la remoción parcial de la glándula. Normalmente el bocio simple desaparece espontáneamente. Aunque un agrandamiento progresivo de la tiroides y el desarrollo de nódulos endurecidos pueden indicar una evolución hacia la malignidad.