Batik

El batik es una de las varias «técnicas de teñido por reserva» (Ikat; Tie Dye; Plangit; Bandhana; Shibori). Es utilizado para colorear tejidos y consiste en aplicar capas de cera sobre las regiones que no se desean teñir (zonas reservadas), fijándose las anilinas en aquellas zonas no reservadas. 

Este proceso se puede repetir tantas veces como se desee, lo que permite sobreponer colores, logrando con ello una muy rica variedad de matices. La propiedad que tiene la cera de resquebrajarse una vez endurecida, permite que en el posterior teñido se dibujen líneas quebradas o «craqueladas». Este «craquelado» constituye el sello diferenciador de esta técnica de teñido de otras similares como el shibori, por ejemplo, que no se trabaja con cera y sus líneas las debe a amarres o finos pliegues en la tela.
La técnica del batik está extendida en países como la India, Sri Lanka, Irán y Tailandia pero donde es más popular es en Indonesia y Malasia. La isla de Java en Indonesia es famosa por sus batiks. El batik indonesio fue inscrito en 2009 sobre la Lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.1
En diferentes zonas de África también se realiza esta técnica de forma muy similar a la de Indonesia.
Etimología
Batik es una palabra javanesa proveniente de la voz «ambatik». La terminación “tik” de la palabra “batik” significa “un poco”, “un pequeño lugar”, “una gota”. Esa terminación procede de la palabra javanesa “tritik” o “taritik”, una tela en la que aparece un diseño que parece estar compuesto de gotas. También se encuentra en el nombre “nitik” del diseño de batik, que imita diseños de lunares. Así, la palabra “ambatik” puede ser literalmente traducida como “una tela de gotas (de cera o almidón)”.
Técnica
La mezcla: Usualmente se prepara en una proporción de 30% de cera de abeja (más elástica y flexible) y 70% de parafina (más quebradiza). Diferentes proporciones de cera oparafina, con que se preparen las mezclas, determinan diferentes tipos de craquelado en el teñido final.
La aplicación: Como la aplicación de la cera sobre la tela es en caliente, deben usarse herramientas apropiadas, éstas llevan generalmente acabados metálicos y se construyen de acuerdo al tipo de aplicación. Para trazo de líneas, por ejemplo, se usan distintos tipos de «tjanting». También se pueden utilizar pinceles de pelo duro para recoger la cera y depositarla sobre la tela. Después de la aplicación de la cera es cuando se tiñe el tejido y una vez seco se repiten los pasos anteriores, tapando con la cera los colores a conservar ya que el resto de la tela seguirá recogiendo color del tinte que se aplique.
Técnica de teñido por reserva
Se denomina técnica de teñido por reserva a una serie de métodos tradicionales para teñir telas con motivos o patrones. Estos métodos se utilizan para «reservar» o prevenir que la tintura penetre en toda la tela, por lo tanto generándose un patrón entre las zonas alcanzadas por la tintura y aquellas donde no ha penetrado. Las técnicas más comunes utilizan ceras, algún tipo de pasta, o un medio mecánico que manipula la tela (por ejemplo atado o cosido) para prevenir que la tintura penetre. Otra forma de evitar la penetración de la tintura es mediante algún agente químico con un tipo específico de tintura asociada de manera de repeler a que otro tinte se imprima sobre la pintura base. Las versiones más conocidas en la actualidad son tie-dye y batik.
Técnicas tradicionales que utilizan cera o pasta 
Indonesia, Malasia e India – Batik con cera
Japón – Rōketsuzome con cera, Katazome, Yūzen y Tsutsugaki con pasta de arróz
África -entre otras denominaciones, Madiba
Técnicas tradicionales que utilizan atado o cosido 
Indonesia y Malasia – Ikat, donde solo el urdimbre o contrahilo es teñido.
India – Bandhni
África – Adire
Oeste moderno – Tie-dye
Japón – Shibori
Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Batik

 
COMO REALIZAR BATIK
La técnica del batik consiste en aplicar sucesivas capas de tinte y cera. La cera preserva el tejido de la absorción de las siguientes capas de tinte. Un acabado muy característico es el craquelado, resultante de quebrar la cera antes de aplicar una nueva tintada. Posteriormente se retira toda la cera y finalmente se fija el color. 
Esta técnica puede realizarse sobre otras fibras como el algodón. 
1-Los materiales necesarios para el batik en seda son:
seda, pinturas o tintes especiales para seda, pinceles de varios tamaños, bastidor de madera, chinchetas de 3 púas o garras y gomas (para sujetar la seda al bastidor), cera y parafina (en cantidades variables), calentador de cera, tjanting y pinceles para aplicar la cera y el tinte sobre la seda, y una plancha y papel de periódico viejo (o papel secante) para retirar la cera. 
CONSEJO: Es recomendable tener a mano papel absorbente o de cocina para absorber el exceso de tinte, y botes de cristal (para realizar y guardar mezclas). 
2-Una vez decidido el diseño se monta la seda blanca sobre el bastidor con chinchetas de 3 púas (cada 5 o 10 cms aproximadamente), dejándola bien tensa. 
Para los cuadros, hay que centrar bien el diseño, ya que un margen quedará fuera. 
CONSEJO: A la hora de pintar pañuelos de seda ya confeccionados (con el borde rematado), es más práctico utilizar garras para sujetarlos al bastidor: de esta forma evitaremos las marcas de color que dejan las chinchetas. 
3-Se derriten la cera y la parafina en el calentador, y mientras se da el color de base (el que se verá más claro) deseado en el tejido. Un pincel de espuma resultará muy útil. 
CONSEJO: La proporción de cera y parafina determina el grado de craquelado. Cuanta más parafina, mayor será el craquelado. Asimismo, si mantenemos el tejido en el bastidor durante todo el proceso, no conseguiremos craquelado, pero si lo quitamos, arrugamos, y volvemos a montar, la siguiente capa de color lo hará evidente. 
4-Cuando la capa de color esté completamente seca, se procede a aplicar la cera derretida, bien sea con el tjanting o con pincel o brocha. Debemos tener en cuenta que todo lo que «pintemos» con cera en este momento permanecerá del color que tenemos en el tejido en ese momento. Es decir, si el tejido está en color naranja y hacemos una cenefa con cera, la cenefa quedará naranja en el resultado final. 
CONSEJO: Es muy importante que la seda esté seca antes de aplicar la cera, pues de otra forma podría despegarse y no actuar como reserva. Para evitar el exceso de humedad, utilizaremos el papel absorbente o de cocina.
5- Seguidamente se aplica otra capa de color sobre el conjunto. Este color, obviamente, debería ser distinto al anterior para que se aprecie la diferencia. Habitualmente se utilizan tonos distintos dentro de la misma gama. Si quedan gotas de tinte sobre la cera anteriormente aplicada, pueden eliminarse con papel absorbente. Una vez seco, aplicamos otra capa de cera, y así sucesivamente hasta alcanzar el resultado deseado. 
6-Durante este proceso alternativo de aplicación de cera y tinte, si queremos lograr un craquelado de cierto color sobre capas anteriores, desmontaremos la seda del bastidor, arrugaremos, volveremos a montar, y aplicaremos dicho color. Esta tintada, al penetrar en las grietas, es la que produce el craquelado. 
CONSEJO:Normalmente es suficiente realizar esto en la última capa de cera aplicada. Podemos realizar un craquelado fino y continuo, grande y espaciado, en forma de estrella… según la forma en que arruguemos el tejido. Luego aplicamos la capa de color más oscuro (puede ser incluso negro), y retiramos las gotas sobre la cera.
7-Una vez concluido el diseño y seca la última capa de tinte, tenemos que retirar la cera aplicada sobre la seda. Para ello utilizamos papel y plancha. Se coloca una capa de papel debajo del tejido y otra encima. Procedemos a planchar sobre el papel: la cera se derretirá, absorbiéndola el papel. Hemos de ir quitando papel a medida que se encere, e ir poniendo capas de papel nuevo. Continuamos hasta que no quede rastro de cera en el tejido. 
CONSEJO: Podemos utilizar papel de periódico teniendo la precaución de que sea viejo. Un par de meses pueden ser suficientes. Esto evita que la tinta de la impresión pueda manchar nuestra seda.
8-La pintura se fija a la seda mediante la plancha o vapor, según el tipo o marca de la pintura. Si es para vapor (la que usamos los profesionales por sus excelentes resultados), se puede enrollar la seda en papel de periódico viejo o tela de algodón (los extremos en papel de aluminio) y cocerla 1 hora en la olla con 2 vasos de agua, en un cestillo tapado con papel de aluminio de forma que no toque el agua (con otro cestillo debajo, p.ej.). 
CONSEJO: Los profesionales utilizamos un aparato especial y de gran tamaño que previene las inevitables arrugas que pueden surgir con el fijado en olla. La sedas deben cocerse durante 3 horas y quedan sin arrugas, con un brillo excepcional y la caída propia de la seda. Dado que el aparato es muy caro, de forma amateur se aconseja el uso de la olla o encargar el fijado en una tintorería.
9-Se lava la seda en agua tibia para eliminar el tinte sobrante, a mano y con cuidado, sin frotar. Se deja secar y, aún húmeda, se plancha a temperatura media. Posteriormente se monta sobre bastidor de madera con chinchetas o grapas, con un fondo blanco debajo para mayor brillo. 
CONSEJO: Para eliminar los últimos restos de cera sobre el tejido puede realizarse un lavado en seco. 
10- El resultado obtenido es un precioso y original batik de seda con vivos colores que podremos lavar (por separado, con un detergente neutro, en agua fría) si se ensucia o coge polvo. 
Como cualquier otra pintura original, no debe exponerse directamente al sol para evitar que destiña.
Fuente:
http://www.arteazul.com/Seda/batik1.html#ixzz2WWJvSMOQ
http://www.arteazul.com/Seda/batik2.html#ixzz2WWK9Gdd9