“La motivación es la que te pone en marcha, el hábito es el que te ayuda a continuar”.
Si quieres lograr tus metas, deja de buscar formas de estar motivado. El éxito no se logra con motivación, se logra con hacer lo que debes, tengas o no ganas de hacerlo, y eso tiene otro nombre, DISCIPLINA; asique en lugar de buscar estar motivado, aprende a ser disciplinado…
La mente es la que gobierna todas nuestras pasiones y facultades para que el cuerpo logre sus resultados. La mente es donde se definen las ideas, pensamientos, afirmaciones, creencias y valores, que determinan una visión acerca de uno mismo y del entorno. Estas determinan una realidad, por eso, el rendimiento no sólo es físico, sino que es el resultado de todo lo que pensamos y sentimos. De tal manera, una mente negativa y compleja no llevará a buenos resultados. En el plano del entrenamiento mental, las habilidades y cualidades que marcan la excelencia deportiva, son tales como la confianza en sí mismo, la motivación intrínseca, el compromiso y la actitud correcta frente al desafío definido.
Concepto de motivación en el deporte:
Motivación es la combinación entre los deseos y energías de la persona para alcanzar una meta. Las personas pueden ser motivadas por creencias, valores, intereses, miedos, entre otras causas o fuerzas.
Es una energía que nos mueve emocionalmente para conseguir algo que queremos, es energía en movimiento.
Es el motivo que tenemos para la acción, nuestro propósito.
Algunas de estas fuerzas/energías pueden ser internas, como: necesidades, intereses y las creencias.
Las externas pueden ser: el peligro o el medio ambiente.
La motivación de una persona depende de:
La fuerza de la necesidad.
La percepción que se tiene de cierta acción para ayudar a satisfacer cierta necesidad.
Características:
Fuerza que activa y dirige el comportamiento. El primer motivo básico es la supervivencia, según la Pirámide de Maslow.
· La motivación a veces se confunde con las emociones. Las emociones son reacciones subjetivas al ambiente.
· La motivación puede ser tanto personal, como deportiva y muchas veces una va de la mano de la otra.
La motivación puede ser:
Extrínseca/Externa: La Motivación externa se refiere a que la persona espera que alguien externo a él le marque la dirección a seguir o lo impulse a la acción para conseguir metas ( dinero, posición, poder, fama, pertenecer, reconocimiento, venganza.) Persiguiendo la Zanahoria.
Intrínseco/Interno: motivación personal, se realiza únicamente por interés o por el placer de realizarla. La función de esta necesidad psicológica es la de impulsar al ser humano a mejorar y a dominar su entorno. Esta nos sirve para conseguir metas más difíciles.
Características que hacen que tenga interés la motivación intrínseca:
Autodeterminación: pensamos que aquello depende de vos, capacidad de elegir.
Modelo de activación intrínseco: Existe un nivel óptimo de conseguir este reto, entre el grado de dificultad y el grado de habilidades y capacidades. Cada persona tiene un nivel óptimo de conseguir su reto, donde se siente completo.
Motivación del logro y competitividad: El alto rendimiento y la obtención de logros superiores no son privativos de algunos países, equipos o personas por alguna razón de exclusividad permanente. Tampoco está muy relacionado principalmente con la cantidad de recursos invertidos para dichos propósitos, y aunque parezca extraño, el talento por sí sólo no basta. En un mundo de exigencias y resultados como el que están sometidos cotidianamente los deportistas, el desarrollo de habilidades psicológicas constituyen una necesidad y un valor en sí mismas, no solo para la obtención de logros, sino que también para hacer posible una vida que armonice aspiraciones personales y profesionales, sin el conocido costo del estrés.
En el deporte de alto rendimiento, así como en el deporte formativo y recreativo no solo se entrena físicamente, sino que de manera más creciente el entrenamiento psicológico es un elemento fundamental para marcar la diferencia en los niveles de rendimiento que se alcanzan y en la obtención de ventajas y beneficios inherentes al hacer el intento de armonizar productivamente cuerpo y mente. En la competencia deportiva, los equipos que se trazan objetivos, metas individuales y colectivas, muchas veces pueden fracasar por no considerar en su verdadera dimensión, cuánto puede hacer la mente para elevar el rendimiento y la capacidad de gestión frente a situaciones imprevistas, es decir fuera del plan trazado. Las situaciones desestabilizantes por factores percibidos como amenazas que enfrentan los equipos en el terreno de juego, inciden en los niveles de motivación y
en las capacidades efectivas para la obtención de logros. Definitivamente el mapa no es el territorio, y esto, los atletas tienen que aprenderlo.
Transitar del plan a la ejecución, y del entrenamiento a la gestión efectiva es un aprendizaje ineludible para enfrentar desafíos mayores.
El cuerpo y la mente en un momento pueden ser autocomplacientes de los niveles de logros obtenidos, pero la pregunta que siempre se puede hacer la mente es: somos mejores comparados con qué o con quiénes.
Lo que importa en suma son sus niveles de motivación, la preparación para activar óptimamente su nivel de rendimiento, su capacidad de focalizar la atención en logros desafiantes y de visualizar escenarios futuros. En esto, el entrenamiento psicológico tiene mucho que aportar al campo deportivo.
A través del deporte se puede aprender lúdicamente que la competencia define de manera muy concreta el valor del esfuerzo, el deporte aprende del fracaso y lo transforma en una mejora de oportunidades.
Orientaciones hacia el resultado y hacia la Tarea :
Orientación hacia el Resultado: Esta orientación también es conocida como una orientación competitiva.
En este caso los deportistas se preocupan de compararse por los demás y en derrotarlos.
El resultado es que cuando ganan una competencia tienen una elevada capacidad percibida de sí mismos y cuando pierden ocurre lo contrario. (MOT- EXT)
Orientación de Tarea: Lo central es que el deportista realiza sus ejecuciones en función de la tarea y con respecto a lo que son sus propias habilidades, su capacidad percibida no se basa en la comparación con los demás. La orientación hacia la tarea origina como resultado una sólida ética deportiva, una persistencia a pesar del fracaso y una ejecución óptima a beneficio de un avance personal/deportivo.
Esta orientación puede proteger a la persona de la decepción, la frustración o la falta de motivación que acaso surjan cuando su ejecución sea superada por la de los otros (que a menudo no podemos controlar). Las personas orientadas hacia la tarea también eligen desafíos realistas o moderadamente difíciles. No tienen miedo al fracaso, y, dado que su percepción de capacidad se basa en sus propios estándares de referencia, les resulta más fácil que a las personas orientadas hacia el resultado el sentirse bien consigo mismas y
poner de manifiesto una elevada competencia percibida. En los deportes, la capacidad de focalizar la atención en el transcurso de la actividad deportiva, resulta clave para exhibir
logros acumulativos y resultados exitosos. Fomentar las capacidades de concentración y de ser selectivos en la dirección que le imprimimos a los objetivos en el proceso de competencia, determina en gran medida, la eficiencia en la consecución de resultados sustentables en el tiempo. (MOT –INT)
Propender al alto rendimiento requiere del uso de facultades y condiciones que son parte de nuestra condición humana. El deporte nos ofrecen oportunidades concretas de apreciar el valor del esfuerzo, en donde más allá del talento, los entrenamientos y aprendizajes cultivados, así como de los conocimientos adquiridos y experiencias acumuladas, nuestra identidad signada por una misión puede elevar a una persona, por muy lejanos que nos parezcan pueden transformarse en umbrales que la mente generosamente traspasa hacia nuevos desafíos deportivos.
La reflexión que te invito a identificar es:
¿“PARA QUÉ HACES LO QUE HACES”?
Talento no significa que hayas recibido algo… Significa que TIENES TODO PARA LOGRARLO!!!
Malvina Mierez – Ricardo Labrone: Neuro-Entrenadores de Grupo Ciemec (@grupo.ciemec – @ciemec)
