Alternativa: Víbora

Reptil ofídio de pequeño tamaño y color pardo, con dos dientes huecos en la mandíbula superior, por los cuales sale un líquido venenoso cuando muerde: las víboras son comunes en las montañas europeas y en el norte de África.

Víbora áspid
Víbora venenosa de cuello delgado y tamaño no superior a los 61 cm, de color cobrizo o anaranjado por el dorso, adornado con unas franjas pardo oscuras o negras, a veces en zig-zag, y gris, amarillento o negruzco en la región ventral.
Tiene una mancha amarilla o rojo anaranjada en el extremo de la cola y en ocasiones 1 V invertida sobre la cabeza; las escamas de la cabeza son pequeñas, el iris de los ojos son amarillos y el extremo del hocico está algo levantado, lo que le da una forma respingona. Los colmillos los tiene adelantados y curvos, y, a través de ellos, fluye el veneno.
Es común en Europa, pero son más abundantes en las regiones montañosas, preferentemente en las más altas, incluso han llegado a encontrarse víboras áspid a 2.900 m en los Alpes y a 2.600 m en los
Pirineos.
Esta vivo vive en lugares cálidos y secos, en rocas, áreas aisladas y tierras pobres; en un territorio que no suele abandonar. Es activa tanto de día como de noche, se esconden en un hoyo del suelo o entre las rocas; durante la estación fría hibernan y a veces se enrollan varias juntas en un mismo sitio.
Es una víbora de movimientos lentos, pero agresiva y peligrosa para el hombre.

Alimentación
Se alimentan de pequeños mamíferos como los ratones, común y de campo, aves jóvenes y lagartos. Los animales jóvenes comen lombrices de tierra e insectos.

Reproducción
Se aparean en abril y mayo y, el cortejo comienza con una lucha ritual entre machos, delante de la hembra; los machos intentan intimidar a sus vecinos irguiéndose en forma de S; si ninguno abandona el terreno se persiguen unos a otros e intentan enrollarse entre sí. Nunca intentan morderse, así que no se ocasionan ningún daño.
Son ovovivíporas; la hembra mantiene los huevos en su cuerpo hasta el momento que nacen las crías, cada una puede parir de 4 a 18 crías, que miden unos 17 ó 20 cm. El veneno de esta víbora es más lento y muy dolorosa, pues coagula la sangre y destruye el epitelio de los vasos sanguíneos.

Víbora bufadora
Serpiente de cuerpo robusto, cabeza ancha y bien diferenciada del cuello, cola corta, un profundo entrante de función desconocida encima de las fosas nasales. Algunas especies tienen dos escamas erectas que parecen cuernos.
Existen 8 especies que son Bitis arietans, víbora bufadora común, Bitis atropos, víbora de las montañas de El Cabo, Bitis caudalis, víbora bufadora cornuda, Bitis cornuta, víbora de cuatro cuernos, Bitis gabonica, víbora del Gabón, Bitis inornata, víbora bufadora de El Cabo, Bitis nasicornis, víbora rinoceronte, y Bitis peringueyi, víbora bufadora de Peringuey. Viven todas en África, y su tamaño oscila entre los 30 cm que mide la víbora de Peringuey y los 2 m o más de la víbora del Gabón.
Aunque todas pertenecen al mismo género, se pueden reunir en dos grupos: las víboras del Gabón y la rinoceronte, que tienen vivos colores y viven en las selvas tropicales de África; y el resto, de colores más apagados en pardo y gris, si se exceptúa la víbora bufadora común, de color amarillo con rayas oscuras en la espalda, que vive en las praderas y desiertos.
Tanto un grupo como el otro, armonizan bien con el terreno en que viven, mimetizándose con la vegetación las de vivos colores o pasando desapercibidas las de las praderas y desiertos; las especies más pequeñas de víbora bufadora viven en tierras arenosas, y aunque algunas pueden trepar a los arbustos, lo normal es que vivan en el suelo y salgan a cazar por la noche.
En su cabeza, están las grandes glándulas venenosas, que pueden segregar hasta 15 gotas en una sola mordedura, (sólo cuatro gotas son suficientes para matar a un hombre). El efecto de la mordedura es mortal, aunque menos rápido que en otras serpientes. Esta serpiente ataca solamente para incapacitar a sus presas o en defensa propia, pero también se considera peligrosa a la provocación. Su nombre, bufadora, indica que avisan con un bufido antes de atacar.
La dieta varía mucho de una especie a otra, las presas pequeñas son tragadas sin envenenar, pero a las mayores les clavan los colmillos, así que huyen, hasta que les sobreviene la muerte a causa del veneno.
La víbora, que ha seguido su rastro para comérselas, abre la boca, en la que introduce la presa entera, con ayuda de los dientes de la mandíbula inferior y, mientras, mantiene la cabeza erguida con objeto de facilitar el paso por la garganta.

Alimentación
Estas víboras se alimentan de ratas, ratones, pájaros, ranas, sapos y lagartos; la víbora de las montañas de El Cabo come además otras serpientes. La víbora bufadora cornuda y la de cuatro cuernos se entierran en la arena, dejando fuera sólo los ojos y la boca; la cornuda a veces asoma y mueve la punta de la cola, para cazar lagartijas.

Reproducción
La cópula se realiza de octubre a diciembre, y el espermatozoide puede sobrevivir dentro de la hembra durante largos períodos. Son ovovivíporas, y los huevos maduran en el interior de la hembra durante cinco o seis meses; las crías nacen vivas, entre 8 y 15, en las especies menores, y de 70 a 80, en las grandes. En algunos casos ponen los huevos y al poco tiempo salen las crías.
Estas víboras son enemigos temibles para muchos animalillos, pero ellas tienen pocos depredadores, entre los que se encuentran aves rapaces, mangostas, facóqueros y el hombre. Las víboras bufadoras acumulan grandes cantidades de grasa, que en África se vende en los herbolarios como remedio para curar el reumatismo.