Tarija

San Bernardo de Tarija o Tarija, ciudad originalmente fundada con el nombre de Villa de San Bernardo de la Frontera de Tarixa, es un cantón y una ciudad de Bolivia, capital de la provincia Cercado y del departamento homónimo.

Cuenta con una población de 563.342 habitantes en total. Se encuentra ubicada en el valle del río Guadalquivir a 1834 m s. n. m..
La ciudad fue fundada el de 4 julio en 1574 por el capitán español de Sevilla—Andalucía, Don Luis de Fuentes y Vargas, por órdenes de Francisco Álvarez de Toledo, virrey del Perú.
Aun durante el régimen del Virreinato del Río de la Plata, en 1807, poco antes de las Guerras de independencia hispanoamericanas, pasó a depender con todos sus territorios a la Intendencia de Salta del Tucumán. Durante el proceso independentista de la corona de España, el Cabildo de Tarija envía como diputado a la Junta Grande de 1810 celebrada en Buenos Aires, al abogado tarijeño José Julián Pérez de Echalar, para integrarse a las Provincias Unidas del Río de la Plata.
Debido a su incorporación reciente a la intendencia de Salta (1807), y las disputas jurídico-políticas con la intendencia del Potosí por el territorio de Tarixa en cuestión, provocó que su situación política fuese de cierta autonomía, pero a la vez compleja. Una vez Independizados de España los Estados argentino en 1816 y del Alto Perú en 1825, la cuestión de Tarija emergió inmediatamente al hacer incierto su futuro político (hasta 1826) la incertidumbre recaía en saber si correspondia anexarse al joven Estado del Alto Perú o unirse al Estado argentino, pues las autoridades argentinas hicieron reclamos formales de soberanía sobre los intentos pro bolivianos de escindirla de la Provincia de Salta. Por ello la Asamblea Constituyente altoperuana de 1825 que fundó la República de Bolívar, hoy República de Bolivia no admitió a los pretendidos representante de Tarija. Finalmente, tras un cabildo, los políticos tarijeños de la época, influenciados por el Gral. Bernardo Trigo Espejo y apoyados por las fuerzas militares a las órdenes de Antonio José de Sucre bajo el mando de Francisco Burdett O’Connor decidieron en 1826 anexarla a la recién creada Bolivia, designando de facto a Bernardo Trigo como su primer Prefecto, desplazando al teniente Gobernador Felipe Echazú, nombrado por el gobernador de la provincia de Salta, Juan Antonio Álvarez de Arenales. Una de las reacciones del gobierno Argentino fue crear la Provincia de Tarija, lo que dio lugar al conflicto diplomático posterior o Cuestión de Tarija. La acción militar más relevante por la pertenencia de Tarija entre Argentina y Bolivia, fue la del Combate de Montenegro.

Historia
Los primeros pobladores del valle de Tarija fueron los que tendrían una cultura llamada Tarija Inciso. La zona fue poblado por pequeñas tribus como los juríes o moyos moyos, pequeña población de guaraníes y principalmente los tomatas y churumatas. Todos estos fueron los primeros al resistirse exitosamente a la conquista incaica, posteriormente un tratado de no conquista que consistío en la cual los incas se llevarían algunos pobladores guerreros marginalmente a lo largo y ancho de los Andes, convirtiéndolos en poblaciones mitimaes, todo esto a cambio de que los incas no colonizen ni se asienten en territorio de los indígenas tarijeños. A la llegada de los españoles a la región, quedaban tan sólo grupos de tomatas y ciertos indígenas pero que también se generalizaron como tomatas, del que fue parte de la civilización churumata solo quedan vestigios de caminos empedrados que recién están empezando a ser redescubiertos.
La ciudad de Tarija fue fundada el 4 de julio de 1574, según lo documentaron los padres Antonio Comajuncosa y Alejandro Corrado, con el nombre de «Villa de San Bernardo de la Frontera de Tarixa» (la «x» con un sonido equivalente a la «j» española actual) por el capitán Luis de Fuentes y Vargas, un hidalgo sevillano, quien llevó un contingente de naturales Chichas, fundando la nueva población en la ribera izquierda del río Nuevo Guadalquivir, siguiendo órdenes del virrey peruano Francisco Álvarez de Toledo, posteriormente los chichas y naturales regresaron hacia su lugar natal Chichas. La real provisión para la fundación había sido emitida por el virrey Álvarez de Toledo en la ciudad de La Plata (Sucre), el 22 de enero de 1574.
También se le conoció como San Bernardo de La Frontera. El principal objetivo de la fundación de la ciudad de Tarija fue establecer un antemural a las incursiones de los chiriguanos desde el Gran Chaco. La fundación de la actual ciudad de Tarija fue realizada por Fuentes y Vargas luego de haber estado con sus tropas en La Calama, parte de Tarija La Vieja (San Lorenzo). El ejido inicial de la ciudad de Tarija en 1574 se extendía unas 20 leguas (aproximadamente 110 km) hacia el lado de los tomatas («indios de paz») y unas 30 leguas (aproximadamente 165 km) hacia el lado de los «chiriguanos» («indios de guerra»).
En el imaginario local, el nombre de Tarija sería un tributo a Francisco de Tarifa, supuesto miembro andaluz de la expedición de Diego de Almagro, sin embargo no existen documentos históricos, (a excepción de una nota de la edición 37 del 8 de mayo de 1721, página 19 de la «Descripción de la provincia de Chichas y Tarija» aparecida en «El Mercurio Peruano») que confirmen esta creencia. En concreto, ninguno de los españoles que acompañaron a Almagro en su entrada al valle (1535) llevaba el apellido Tarifa. Por lo tanto, algunos creen que el término sea de origen indígena de la lengua tomata-churumata lengua desconocida pero que tenía una mixogenización con idioma guaraní, existen varios topónimos de lugares aledaños cuyo sonido es similar al de Tarija: Tariquía y Tajzara, los españoles, al pronunciarlos incorrectamente, lo habrían deformado a Tarija. Sin embargo, en el año 2011 el historiador y director del Archivo Histórico de Tarija, el tarijeño Elías Vacaflor Dorakis afirmó que: en el año 1535 la expedición de Diego de Almagro se organizó en siete grupos de españoles que partieron consecutivamente desde Cuzco hacia el sur siguiendo el camino del inca (la red vial incaica en Bolivia se ubican en los departamentos Potosí, Oruro, La Paz y por extensión Cochabamba.), en el primer grupo estaban los españoles Juan de Sedizo, Antonio Gutiérrez y Diego Pérez los cuales llegaron a Tupiza a inicios de agosto de 1535, salieron de la zona de «Tupiza» para explorar las regiones del este, al explorar notaron la existencia de una ciudad abandonada que se hallaba bajando unos «senderos» similar al la red vial del inca pero de distinta manera ya que este no era de origen inca, de ese modo llegaron al hoy llamado Valle de Rosillas donde encontraron las ruinas del Antigal, esas ruinas serían las de «Tulku Marka» («Laberinto Fuerte») en las cuales algunos edificios parecían torretas o torrecillas (pequeñas torres), por el aspecto del valle y por las «torretas» los españoles encontraron semejanzas con el valle español de Torija (en la Provincia de Guadalajara), de este modo llamaron al valle de Rosillas como Valle de Tarija ya que tarija era una palabra árabe andalusí palabra que transliterado llega a ser Táriq, el que difundió dicha palabra que también fue nombre del mismo, fue el General Táriq ibn Ziyad cuál primer nombre significa torreta, toda esta exploración habría ocurrido entonces 39 años antes de la fundación de la Villa de San Bernardo de Tarixa, la ciudad de nombre Tarixa llega a ser un derivado de los nombres de la ciudad de Torija y del General Táriq. A los pobladores de la zona de los valles centrales y de la zona de los valles altos subandinos de Tarija se les conocen como «chapacos».

Tempranamente, merced a su clima mesotérmico o templado, prosperaron los cultivos y la ganadería: vid, trigo, naranjo, olivo; cría de vacunos, porcinos, ovinos y equinos. Esto favoreció la radicación de colonos españoles, sobre todo andaluces y vascos, poco mestizados con los indígenas, lo que dio lugar a la actual cultura gauchesca y al estilo de vida popularmente conocido como la del «chapaco», inicialmente relacionada al hombre/mujer de campo, ahora generalizada a todo tarijeño, con excepción de los habitantes de la Región Autónoma del Gran Chaco, correspondiente a la Provincia Gran Chaco, quienes prefieren ser identificados como «chaqueños».
Ya en tiempos coloniales Tarija y la región se convirtieron en proveedoras de vinos y aguardientes (por ejemplo la bebida singani) a las ciudades del Alto Perú.

Al estallar la revolución de 1809, patriotas argentinos y realistas se disputaron encarnizadamente la ciudad. La batalla de la Tablada (15 de abril de 1817), comandada por el entonces teniente coronel tucumano, Gregorio Aráoz de Lamadrid, junto a Francisco Pérez de Uriondo vencen a las tropas españolas mientras los guerrilleros tarijeños de los Gauchos de Güemes, encabezados por el «Moto» Méndez, sitiaron la ciudad para evitar las comunicaciones de los realistas; victoriosos sumaron un triunfo más para los patriotas.
Durante el resto del siglo XIX, y durante el siglo XX, la ciudad continuó progresando, material y culturalmente, merced a la radicación de algunas familias de inmigrantes europeos, sirios y judíos que dinamizaron la economía de la región.

Geografía

La ciudad de Tarija integra la Provincia Cercado y se encuentra situada en el valle central del departamento de Tarija. Limita al norte y oeste con la provincia Méndez, al este con la Provincia Burdet O’Connor y al sur con las provincias Avilés y Aniceto Arce.

Clima
Su clima es templado, con una temperatura promedio de 20° C, aunque cada estación es muy marcada. Durante los inviernos (especialmente durante el mes de julio) la temperatura suele descender por debajo de los 9° C, llegando a disminuciones térmicas inusuales para la latitud y altitud (la zona es, en los mapas, «tropical»). Esta característica climática, más su ubicación geográfica y altitud favorecen el cultivo de cepas nobles de vid, y por ende vinos de alta gama, como Tannat, Cabernet sauvignon, Sirah y otras.
Los inviernos suelen tener temperaturas agradables durante el día y frías durante las noches; por ejemplo, en 1966, se registró en esta ciudad una temperatura absoluta de -9,5 °C (nueve grados y medio bajo cero) y el 20 de julio de 2010 la temperatura bajó a – 9,2 °C, acompañada por nevadas leves. En el 25 de julio de 2019 se produjo la nevada más copiosa e intensa hasta ahora conocida, tomando en cuenta los registros oficiales que rigen desde 1954. El clima de Tarija puede ser clasificado como clima semiárido cálido (BSh/BSk) de sensación y calor típicamente mediterráneo — fronterizo con el clima oceánico de invierno seco (Cwb), según la clasificación climática de Köppen.

Economía
La principal actividad económica del municipio es el turismo, la industria vitivinícola y la gastronomía, tanto de la región como de carnes asadas a la brasa o a la leña. Se producen vinos y singanis de gran calidad para el consumo nacional y la exportación. La ciudad tiene también plantas de procesamiento de derivados lácteos y grandes ganados ,industrias madereras, fábricas de cerámica roja y envasadoras de frutas. La mayoría de estos productos tienen mercados dentro y fuera de Bolivia. También el comercio informal que da más que cualquier cosa (contrabando).
El área rural del municipio abarca un área extensa, con micro regiones en las cuales se desarrolla una actividad agrícola muy diversificada. Además de cultivos de vid, tiene cultivos de pepinillo, ajo, arándanos, orégano y flores para el mercado nacional y para la exportación. Tiene hatos de ganado lechero Holstein y granjas avícolas de gran capacidad productiva. Además de las labores agropecuarias, Tarija es sede de hábiles artesanos que fabrican sombreros, tejidos y cerámicas.
Tarija tiene una ventajosa ubicación que orienta su actividad turística, particularmente con la República Argentina. Su producción agropecuaria se ha visto favorecida con la construcción de la represa San Jacinto, que provee de agua para riego al valle central. San Jacinto también genera electricidad y es un centro de interés turístico.

Patrimonio

Tarija posee interesantes edificios de la arquitectura colonial. Actualmente tiene una característica que la diferencia de las otras ciudades fundadas en la misma época dentro del Imperio español: la iglesia principal o Catedral, no se encuentra frente a la Plaza Mayor (hoy Plaza de Armas Luis de Fuentes y Vargas). Sin embargo, la catedral no es el templo religioso más antiguo de la ciudad, sino la Capilla de San Juan, emplazada en 1576 en la colina del mismo santo, por lo que hoy en día se la conoce como Capilla de la Loma de San Juan. No existen registros históricos que expliquen su emplazamiento, orientación y vista en ese lugar; probablemente el campanario de la capilla de San Juan fue un referente geográfico de llegada a la antigua Villa de San Bernardo de la Frontera, al descender por el Camino de Indígena desde la cordillera de Sama, o el antiguo y más próximo acceso, por la Cuesta del Gallinazo (actualmente en desuso por efecto del camino construido hacia las comunidades de La Tablada, Tolomosa y San Jacinto) que desembocaba al antiguo vado del Río Guadalquivir, donde actualmente se encuentra el puente peatonal denominado «Puente del Peregrino».
Otros templos religiosos interesantes de observar son la iglesia de San Roque, inaugurada en 1632, y el convento de San Francisco, inaugurado en 1606.
También son icónicas dos hermosas edificaciones estilo art nouveau: la Casa Dorada (actualmente Casa de la Cultura) y el «Castillo Azul».

El moderno Mercado Central es un punto de encuentro obligado para el visitante, donde se puede encontrar desde artesanía local y nacional, alimentos procesados artesanalmente, prendas de vestir, frutas frescas, cestos de mimbre, hasta una variedad de gastronomía típica local en un amplio piso de comidas.
Otros sitios de atractivo en la ciudad son sus parques y paseos: la Avenida Las Américas, la Fuente de los Deseos, el Puente San Martín, el Parque Bolívar, Bio Parque Urbano en la zona de Las Barrancas, los miradores del Sagrado Corazón de Jesús ahora conocido como de La Loma, Mirador de los Sueños, Juan Pablo II, el Parque de las Flores, el Parque de los Héroes y el Parque Laberinto.
Entre sus instituciones de divulgación cultural se encuentran la Biblioteca Municipal, con más de 15.000 volúmenes, el Museo de la Pinacoteca de Tarija (se destacan pinturas del período colonial), las escuelas de ballet; el Museo Palentológico de Tarija y el Observatorio Astronómico de Santa Ana.
En Tarija se encuentra la Universidad Juan Misael Saracho.
Aproximadamente a 15 kilómetros al norte de la ciudad de Tarija, se encuentra la localidad de San Lorenzo con casas del período colonial; donde de encuentra la casa, ahora museo, que perteneció al líder de los milicianos Gauchos de Güemes en Tarija, Eustaquio Méndez.
Hacia el suroeste de la ciudad de Tarija, casi en los límites compartidos por Salta y Jujuy se encuentra la población de Chaguaya, distante a 65 km de la ciudad; siendo célebre por su santuario dedicado a La Virgen.
Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Tarija