El funcionario fue encontrado por la policía; es la presunta voz de una grabación sobre sobornos en el área de Discapacidad, que él dirigía; los hermanos Kovalivker, vinculados a las supuestas coimas, protagonizaron operativos de película
La justicia federal encontró este mediodía al exdirector de la Agencia de Discapacidad (Andis), Diego Spagnuolo, a quien buscaba desde el jueves por la noche. Estaba en su camioneta Nivus, yéndose de su casa del barrio Altos de Campo Grande, en Pilar. Le allanaron el inmueble, le requisaron los autos y los investigadores le secuestraron dos teléfonos celulares, documentos y una máquina de contar billetes.
La Justicia le prohibió la salida del país a Spagnuolo y al exdirector de Acceso a los Servicios de Salud de la Andis Daniel María Garbellini, que también fue allanado. La misma restricción cayó sobre los empresarios Emmanuel Kovalivker, directivo de la droguería Suizo Argentina, y su hermano Jonathan, como así también para su padre, Eduardo Kovalivker.
El objetivo no era detener a Spagnuolo. El fiscal federal Franco Picardi, que tiene a su cargo la investigación, quiere hacerse cuanto antes de todos los elementos que puedan servir como prueba en la causa, que se abrió el miércoles, para investigar presuntos sobornos en el área que Spagnuolo tenía a su cargo.

En las últimas horas se realizaron al menos 15 allanamientos que incluyeron a la agencia que dirigía Spagnuolo, a la droguería Suizo Argentina y a domicilios particulares de empresarios sospechados del pago de sobornos.
Uno de ellos, Emmanuel Kovalivker, directivo de la droguería Suizo Argentina, fue interceptado por la Policía de la Ciudad cuando intentaba irse de Nordelta en su auto con 266.000 dólares repartidos en una decena de sobres con anotaciones. También le encontraron $7.000.000.
La Policía de la Ciudad, encargada de los operativos, se llevó todo eso y también el pasaporte y el teléfono celular de Kovalivker, que según fuentes del caso, ya está en poder de la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (Datip), que depende del Ministerio Público Fiscal.
El operativo fue en el lote 6 del barrio La Isla, en Nordelta.

Quien en cambio logró eludir a la policía fue Jonathan Kovalivker, hermano de Emmanuel, que llegó a irse en su auto. Todo indica que se fue con dinero porque cuando los investigadores llegaron a la casa de Jonathan, donde estaban su mujer y sus hijos, encontraron una caja de seguridad con la puerta abierta y banditas elásticas tiradas en el piso, relataron fuentes al tanto de los operativos.
En total, las cajas de seguridad de la casa son tres. La que tenía la puerta abierta era la de una habitación central. En la de un cuarto de chicos había otra con poco dinero y en la tercera, en lo que parece ser una habitación de servicio, 50.000 dólares, informaron las fuentes.
A Garbellini se lo encontró a primera hora de la noche, en Lanús. Allí también le retuvieron su teléfono celular.
El caso se inició por una denuncia del abogado Gregorio Dalbón a raíz de un audio en el que un hombre que sería Spagnuolo habla de pedidos de coimas en su área. El relato involucra a Karina Milei y a su principal espada política, el subsecretario de Gestión Institucional de la Secretaría General de la Presidencia, Eduardo “Lule” Menem. Se trata de una grabación clandestina, aparentemente editada, de conversaciones privadas.
Spagnuolo fue echado del Gobierno el miércoles por la noche, sin que desde la Casa Rosada se dieran explicaciones.

La Justicia lo buscaba desde este jueves por la noche. El fiscal Picardi le pidió a Casanello allanar, en primer lugar, un departamento en Almagro que sería de Spagnuolo, pero él no estaba allí. Estaba un sobrino. De ese operativo se llevaron un dato: el exfuncionario se había ido a Altos de Campo Grande.
Además de la máquina de contar billetes, en la casa del exfuncionario encontraron muchos billetes de baja denominación, según informaron fuentes que siguieron el minuto a minuto del operativo. En cuanto a los teléfonos, uno lo tenía Spagnuolo con él; el otro estaba dentro de un auto estacionado en su propiedad.
Tras los allanamientos, Dalbón, que fue abogado de Cristina Kirchner, pidió la detención preventiva de los hermanos Kovalivker, de su padre, Eduardo, que preside la droguería Suizo Argentina, y de Spagnuolo.
Los operativos todavía continúan. Siguen buscando a algunos involucrados en el caso para hacerse de sus teléfonos, computadoras y documentos que puedan resultar esclarecedores para la causa.
Después, la prioridad de los investigadores es analizar la prueba reunida y abrir cuanto antes los tres teléfonos celulares secuestrados (los dos de Spagnuolo y el de Kovalivker). En las próximas horas, la Datip podría hacer la “extracción forense” (bajar el contenido de los aparatos), para después avanzar con el análisis de lo encontrado en los celulares.
Con la colaboración de Gabriel Di Nicola
Por Paz Rodríguez Niell
Fuente Lanacion