- El Tribunal de Disciplina abrió un expediente contra el club y los once jugadores que le dieron la espalda a los del Canalla.
- El diálogo por teléfono del presidente del Pincha, Juan Sebastián Verón, con los referentes del plantel.
La charla se produjo horas antes del partido. Juan Sebastián Verón se comunicó desde La Plata y José Sosa atendió en Rosario. El diálogo entre el presidente y el principal referente del plantel duró un rato largo.
-¿Vos como futbolista qué opinás? Estás todo el año luchando, sacrificás tiempo con tu familia, con tus chicos, estás ahí para ser campeón y viene alguien a dedo y te dice que el campeonato lo ganó otro. ¿Cómo te sentís?
-Entonces, ¿por qué hay que hacer un pasillo? No se está premiando el mérito. Central hizo muchos puntos, pero no es lo que estaba en juego. Te llevan engañado y entregan un título. Para mí, hay que dejar un mensaje.
El diálogo, palabras más, palabras menos, fue por esa vía, según pudo reconstruir Clarín. La Bruja, el único dirigente que se enfrentó al poder de la AFA, dio su punto de vista y los jugadores tomaron la decisión de hacer el pasillo de espaldas, muy a pesar de la circular que emitió la Liga Profesional y que Pablo Toviggino, mano derecha de Claudio Tapia, publicó en su cuenta de X junto a una leyenda provocativa.
Sosa habló con Guido Carrillo, que viajó con el plantel a Rosario a pesar de estar suspendido, Leandro González Pirez, Santiago Núñez y Fernando Muslera, los caudillos del equipo, y todos decidieron seguir el consejo del líder. Ya lo habían conversado entre ellos y no estaban convencidos de prestarse a la antojadiza determinación de «Chiqui» Tapia. Lo veían como una “mojada de oreja”, según dijeron desde la intimidad del grupo. Fue el propio González Pirez el que le advirtió a Angel Di María lo que iban a hacer cuando los futbolistas canallas se asomaran por el túnel con la copa decretada en sus manos.
“Nosotros salimos campeones tres veces y solo nos hizo pasillo Argentino de Monte Maíz”, reflexionó un dirigente del conjunto platense. La circular interna que recibieron Leo Mansilla, el empleado que arma la planilla; Diego Raimundo, jefe de prensa; y Marcos Angeleri, director deportivo, obligaba a Estudiantes a reconocer el título que, días atrás, la AFA le había dado a dedo.
“Nosotros cumplimos con lo que pidieron”, dijeron desde La Plata, más allá de que Pablo Dóvalo, el árbitro del partido, informó la situación y, posiblemente, haya una represalia. Puede ser a partir de una multa, aunque en 1 y 57 creen que el vuelto llegaría muy pronto. Sin ir más lejos, el próximo fin de semana enfrentarán a Central Córdoba, equipo al que Nazareno Arasa -en el campo de juego- y Lucas Novelli -en el VAR- lo favorecieron ante San Lorenzo. El conjunto santiagueño tiene el padrinazgo de Toviggino, aliado del gobernador Gerardo Zamora.
Expediente abierto y posibles sanciones por un protocolo de febrero de 2025 que no se cumplió
Sin ir más lejos, el Tribunal de Disciplina actuó a partir del informe de Dóvalo y este lunes dio vista por 48 horas a Verón, la Comisión Directiva y los once futbolistas titulares de Estudiantes para que hagan su descargo en lo que consideran una transgresión normativa.
La resolución especial del Tribunal de Disciplina para Estudiantes de La Plata por la actitud que tuvo con Rosario Central y el pasillo del campeón.
Tapia tiene a Verón entre ceja y ceja porque es el único dirigente que se manifestó abiertamente a favor de la inserción de los capitales privados en Argentina. La Bruja siempre aclaró que el fútbol requiere una modernización, no necesariamente a través de las Sociedades Anónimas Deportivas. Incluso, recibió el apoyo económico de Foster Gillett Jr., el empresario norteamericano que llegó a la Argentina con el objetivo de promoverlas. El acuerdo, finalmente, no prosperó, muy a pesar de los 15 millones de dólares que el magnate invirtió para comprar el pase de Cristian Medina, que pasó de Boca a Estudiantes.
El presidente Javier Milei tiene una consideración especial por Verón, pero en este caso la decisión del presidente pincha no tiene que ver con las apetencias de un Gobierno que se encontró con trabas judiciales para abrirle el juego a las SAD. El ex jugador de la Selección Argentina, Sampdoria, Lazio, Manchester United, Chelsea e Inter entiende que el sistema actual solo mediocriza bajo los lineamientos de Tapia y quiere un crecimiento para su club, desde estructural hasta deportivo. Y para eso, tal cual explicó, necesita de fondos externos.
El posteo en el que Estudiantes informó que no se sometió a votación el título a Rosario Central, el equipo que más puntos sumó en la tabla anual, fue tomado como una declaración de guerra por Chiqui y Toviggino. En el entorno de Verón creen que están “sobregirados”.
La decisión de no hacer declaraciones después de la victoria en Arroyito con el gol de Edwuin Cetré, en definitiva, tuvo como objetivo proteger a los jugadores. Eduardo Domínguez y su equipo festejaron con vehemencia, casi como si se hubiera logrado un campeonato, pero en el vestuario.
“Los muchachos estaban muy cargados. Venían de arbitrajes bochornosos, y después del partido, tenés que hablar de fútbol, no de estos temas dirigenciales”, confió una fuente del vestuario. La protesta se consumó y tuvo un masivo apoyo de los hinchas propios y ajenos. La noticia se viralizó en todo el mundo. Es la primera vez que un club se manifiesta abiertamente contra el manejo discrecional de Viamonte 1366.
Para todo Estudiantes, este partido se vivió como una final. A tal punto que, con idiosincrasia cabulera, cambiaron el hotel para esta ocasión. Dejaron el City Center, donde se habían concentrado las últimas dos veces que viajaron a Rosario (derrota con Central y empate de Newell’s sobre la hora) y se alojaron en el Ros Tower, propiedad de la ex mujer de Miguel Ángel Russo, quien en vida hubiera estado con el corazón partido por la fuerte unión que tuvo con los colores de uno y otro. En el plantel se jactaban de que esta movida fue tan importante como el gol del colombiano.
Fuente Clarin

