Fin a 20 años de socialismo. Sorpresa en Bolivia: un inesperado candidato de centro salió primero y habrá balotaje

Fin a 20 años de socialismo. Sorpresa en Bolivia: un inesperado candidato de centro salió primero y habrá balotaje

El hijo de un expresidente que estaba rezagado enfrentará al exmandatario de derecha; el voto nulo que pidió Evo Morales salió tercero

LA PAZ.- Las elecciones de Bolivia de este domingo terminaron sorprendiendo a todos. El senador y exalcalde de Tarija, el centrista Rodrigo Paz, un “tapado” que venía creciendo fuerte en las últimas semanas, se consagró como ganador con el 31,6 % de los votos, según el conteo rápido (Sirepre).

Paz irá a un balotaje el próximo 19 de octubre con el expresidente de derecha Jorge “Tuto” Quiroga, que logró el apoyo del 27,1 % del electorado.

“Lo que queremos es la reconstrucción de la Patria. Que la economía sea de la gente y no del Estado”, dijo Paz en su discurso de la victoria en El Prado, de esta capital. El candidato democristiano centró su campaña en la lucha contra un “Estado tranca” o burocrático, que obstaculiza la labor privada.

El candidato Rodrigo Paz festeja la victoria en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Bolivia
El candidato Rodrigo Paz festeja la victoria en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de BoliviaAFP/Martín Bernetti

En su discurso no faltó una mención religiosa cuando recordó la tradicional frase “El pueblo unido, no será vencido”, y agregó: “El pueblo unido no será vencido si Dios está con ese pueblo. Hagámosle caso. Hagámosle caso a Dios que nos está pidiendo que cuidemos a Bolivia“.

De todas maneras, advirtió que “aún no está nada dicho” sobre la victoria. “Tenemos que seguir trabajando estos dos meses”, hasta el balotaje.

Los analistas sostienen que Paz cosechó los votos de Jaime Dunn, un economista outsider de tendencia liberal. El Tribunal Supremo Electoral inhabilitó la candidatura de Dunn por la existencia de deudas pendientes con el Estado, en este caso la Alcaldía de El Alto.

Paz, del Partido Demócrata Cristiano, es hijo del expresidente Jaime Paz Zamora (1989-1993). Un dato curioso es que el candidato más votado este domingo no nació en Bolivia sino en España, en Santiago de Compostela, en 1967, durante el exilio de su padre, del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) en medio la dictadura militar boliviana.

Otra gran sorpresa de la jornada electoral fue que el empresario Samuel Doria Medina, de Unidad Nacional, que quedó en tercer lugar con el 19,5 % de los votos, fue derrotado por cuarta vez en su intención de llegar a la presidencia, luego de su fracaso en los comicios de 2005, 2009 y 2014. Por la noche, Doria Medina reconoció su derrota y expresó su apoyo a Rodrigo Paz.

Este resultado contradijo todas las encuestas preelectorales que daban a Doria Medina como un firme candidato a pasar a segunda vuelta, empatado con más del 20 % de los votos con Quiroga. Paz aparecía en un tercer lugar, pero con apenas un 9% de intención de voto.

La campaña de Paz fue austera, marcada por un gasto reducido en redes sociales, contrastó con las fuertes inversiones de sus rivales y terminó capitalizando un voto de cambio.

El resultado de los comicios de este domingo abre, por un lado, un escenario novedoso para Bolivia, que recién en la Constitución de 2009 introdujo el mecanismo de la segunda vuelta y que no lo aplicó hasta ahora.

Pero además marca el punto final para Bolivia del “socialismo del siglo XXI” -encarnado por el Movimiento al Socialismo (MAS) de Evo Morales- que tuvo su apogeo en América Latina con el auge de las materias primas de comienzos de siglo, pero que fue perdiendo votantes en la región, marcado por episodios de despilfarro y corrupción.

Si bien el voto nulo al que convocó Morales logró el 18,93% -más que Doria Medina- ese resultado sólo le sirve para afirmar que hay un voto duro que lo sigue apoyando.

Ahora los votantes decidieron pasarle el mando a la derecha o centroderecha encarnada por Rodrigo Paz, la gran sorpresa de la jornada, y “Tuto” Quiroga, que coinciden en plantear la necesidad del ajuste, el cierre de empresas estatales deficitarias, el equilibrio fiscal y la apertura a las inversiones extranjeras.

Un centro de votación en Laja, en el departameanto de La Paz
Un centro de votación en Laja, en el departameanto de La PazAIZAR RALDES – AFP

Se espera que el próximo presidente también cambie al alineamiento que tenía con los gobiernos autoritarios de la región, como en el caso de Venezuela, Cuba y Nicaragua.

Los comicios de este domingo mostraron también que el próximo oficialismo recibirá un Congreso muy fragmentado, sin mayoría absoluta para ningún partido, a diferencia de lo ocurrido en estos 20 años de hegemonía del MAS.

En la mayor parte del territorio los votantes acudieron a las urnas sin demasiadas complicaciones, pero el clima de hartazgo de la población con el gobierno de Luis Arce y el Movimiento al Socialismo era evidente.

EL voto de Luis Arce
EL voto de Luis Arce[e]JAVIER MAMANI – XinHua

Cuando el candidato oficialista Eduardo del Castillo, exministro de Gobierno del presidente Arce, fue a emitir su voto en Santa Cruz de la Sierra, tuvo que soportar el descontento de los votantes.

Del Castillo se dirigió, sin respetar la fila a la mesa donde le tocaba votar, lo que generó la reacción de rechazo de los presentes. “A la cola, que haga fila como nosotros hacemos fila en los surtidores de combustibles”, le gritó una mujer.

Luego, vinieron los abucheos y los insultos. A pesar de la tensión, el candidato mantuvo la calma, posó para los medios después de su votación y completó su sufragio con aparente serenidad. “Es parte de la democracia”, dijo refiriéndose al incidente para luego abordar un vehículo y marcharse.

El único foco de tensión grave se registró en la región oriental que se conoce como “el Trópico de Cochabamba”, donde tiene su bastión el expresidente Evo Morales -prófugo de la Justicia que lo acusa de trata de menores- que llamó a anular el voto en estas elecciones.

Evo Morales después de votar
Evo Morales después de votarFERNANDO CARTAGENA – AFP

En esa misma región, en el municipio de Entre Ríos, emitió su voto el presidente del Senado y candidato presidencial de Alianza Popular, Andrónico Rodríguez, un líder cocalero que en el pasado fue aliado de Morales.

Luego de la votación del candidato se produjeron choques entre los seguidores de Rodríguez y los de Morales.

“De golpe empezaron a tirar piedras, todo fue muy rápido y violento. Estoy buscando a nuestro fotógrafo, que por todo este lío quedamos separados”, relató el corresponsal del diario El Deber en la zona.

Más temprano, Edson Claure, comandante departamental de la Policía de Cochabamba, también había reportado “una explosión” en ese mismo municipio.

El estruendo fue escuchado por vecinos y testigos que se encontraban en inmediaciones del colegio José Carrasco, quienes señalaron que se trató de un artefacto explosivo de bajo alcance.

Esa localidad está a 154 kilómetros del Chapare, el feudo de Morales. El expresidente acusó en su momento a Rodríguez de reunirse en Santa Cruz de la Sierra con el empresario argentino Marcos Bulgheroni, socio del empresario boliviano Marcelo Claure (aliado de Samuel Doria Medina) en proyectos de explotación de litio en otros países, un tema muy sensible en este país.

En el resto de Bolivia, la jornada transcurrió sin demasiados incidentes.

El Tribunal Supremo Electoral (TSE) que es uno de los cuatro poderes independientes -junto al Ejecutivo, Legislativo y Judicial- ordenó toda la jornada la paralización total del transporte -aéreo y terrestre- para evitar cualquier intento de boicot o, por el contrario, de votantes que fueran trasladados a la fuerza a los centros de votación.

El TSE tomó todas las medidas necesarias para evitar la repetición de lo que ocurrió en octubre de 2019, al finalizar el gobierno Morales, cuando las elecciones en las que supuestamente se había impuesto el oficialismo tuvieron que ser anuladas ante la abrumadora cantidad de denuncias de fraude.

Un artículo particular de la resolución del TSE fue el que prohíbió, por ejemplo, el transporte de personas a los centros de votación. Sólo lo podían hacer los taxis debidamente habilitados y para personas con discapacidad. La medida rememoró un hábito muy común en Venezuela donde, mediante los colectivos chavistas, suben a los ómnibus a los votantes rezagados para llevarlos a la fuerza a los centros de votación.

Las medidas de seguridad

En la Escuela de la Santa Cruz, en el centro de La Paz, el fiscal David Junik explicó a LA NACIÓN otra de las medidas con las que se buscó evitar el fraude. Antes de dar la papeleta a los votantes, los vocales debían mostrarla a todos los presentes y decir en voz alta “Papeleta en blanco”, para demostrar que no tenía ninguna marca.

También estaba prohibido ingresar con teléfonos celulares al lugar de votación ante los rumores de que en algunas regiones se obligaba a los ciudadanos a tomar fotos en el cuarto oscuro con la papeleta marcada con determinado candidato. Si bien un celular se puede esconder en cualquier bolsillo la prohibición sirvió para desalentar la coerción.

Finalizada la votación para el sistema de conteo rápido (Sirepre) que permitió dar la proyección inicial de los resultados, cada mesa de votación envió las actas mediante fotografías. Las papeletas con las marcas de los votantes solo serán utilizadas para el cómputo definitivo.

En las afueras de los lugares donde emitieron su sufragio, algunos votantes hablaron con LA NACIÓN, sobre la situación de Bolivia. Graciela Mamani consideró que “la situación es crítica, especialmente por el alza de precios

En tanto Julio César Sosa atribuyó la falta de estabilidad económica y la escasez de alimentos “al modelo económico de los últimos veinte años” y a la “ignorancia de la gente” que lo apoyó, y se mostró confiado. “Hoy se acabó este modelo”.

Por Rubén Guillemí

Fuente Lanacion