Quiso adoptar una gata y la rechazaron por un insólito motivo: “Hay un solo problema: sos mileísta”

Quiso adoptar una gata y la rechazaron por un insólito motivo: “Hay un solo problema: sos mileísta”

  • Lucía, de 30 años, denuncia que fue discriminada por una mujer que tiene animales en tránsito.
  • Cuenta que le habían confirmado la adopción pero se la negaron después de revisarle las redes sociales y ver su afinidad con el Gobierno.
  • «Eso afecta al gatito», le dijeron. La mujer apuntada desmiente la acusación.

La famosa grieta no descansa, está presente en charlas familiares, rompe amistades y, ahora también, puede dejarte sin mascota. Eso fue lo que le pasó a Lucía Evelin, una joven de 30 años que, tras ilusionarse con adoptar una gatita, terminó siendo rechazada por su afinidad política. “Me sentí bastante discriminada”, cuenta Lucía, aún sorprendida por el insólito desenlace.

Todo comenzó hace unos días, cuando Lucía y su pareja decidieron sumar un nuevo integrante peludo a su hogar en Palermo. “Vivimos en un dos ambientes bastante amplio y buscábamos una mascota para que sea parte de la familia”, explica la joven, amante de los felinos.

Desde chica convivió con perros y gatos en la casa de sus padres, así que tener un michi en su propio hogar era casi una necesidad emocional. Por eso, no bien decidió adoptar, se puso a buscar por Facebook e Instagram.

En uno de esos grupos se cruzó con la foto de una gatita que le encantó y no dudó en escribirle a la mujer que la ofrecía en adopción. “Le escribí a la señora que dejó un número de WhatsApp y que transita gatos. Se llama Silvia Adopciones”, relata.

Hasta ahí, todo normal: contacto vía WhatsApp, presentación, preguntas de rutina. Silvia le explica que esa gatita ya había sido adoptada, pero le manda fotos de otros posibles candidatos.

Lucía se enamora de una hembra y empieza el proceso habitual de adopción: llenar un formulario, enviar fotos del departamento, mostrar que hay redes de protección en los balcones, compartir redes sociales, etc.

Incluso recibió un mensaje alentador: “Adopción confirmada”, acompañado de la lista de compras: comida Royal Canin kitten, recipientes, piedritas. Lucía no escatimó en gastos y se preparó con todo. Pero cuando Silvia recibió los perfiles de Instagram de Lucía y su pareja, el tono cambió abruptamente."Hay un solo problema: sos mileista. Que tremendo", le dijo Silvia a Lucía.«Hay un solo problema: sos mileista. Que tremendo», le dijo Silvia a Lucía.Cuando Silvia recibió los perfiles de instagram de Lucía y su pareja, no quiso darle la gatita en adopción por ser "mileista".Cuando Silvia recibió los perfiles de instagram de Lucía y su pareja, no quiso darle la gatita en adopción por ser «mileista».

Lucía había compartido en sus redes algunas fotos apoyando al gobierno actual. Nada ofensivo, según ella, solo imágenes en la asunción de Javier Milei y en un acto en Parque Lezama. Nada que anticipara lo que vendría.

La respuesta de Silvia fue tajante: “Hay un solo problema: sos mileísta. Qué tremendo…”. Lucía, sin entender, preguntó: “¿Pero eso qué tiene que ver?”. La respuesta fue aún más sorpresiva: “Eran cosas de humanos y eso afecta al gatito. Es fuerte apoyar lo que está pasando. Hay mucho odio y crueldad”.

Y Silvia siguió: “Uno piensa si alguien apoya eso, ¿será bueno con el gatito? Porque hay mucha violencia, insultos, malas palabras, falta de derechos y muchas más barbaridades. Una persona que apoya eso, ¿será buena y amorosa con el gatito? Esa es la relación que hago”.

Lucía no podía creer lo que estaba leyendo. Le explicó que eran personas de bien, que tenían todo listo para cuidar a la gatita con amor. Pero Silvia no volvió a contestar. Solo silencio, y una camita sin inquilina.

“Jamás me imaginé que esta persona me iba a hablar de este tema en la adopción de un gato. Para mí no tiene sentido. Mi respuesta fue muy respetuosa y neutral. Obviamente, tenía ganas de decirle que era un delirio lo que me estaba diciendo”, admite.La gatita que iba a adoptar Lucía y le negaron por su afinidad política.La gatita que iba a adoptar Lucía y le negaron por su afinidad política.

Entre la frustración y el desconcierto, agrega: “Le había comprado todo, camita, comida… y me dejó con todas las cosas porque no me contestó más”. La pregunta sigue rondando en su cabeza: “¿Qué tiene que ver con la adopción de un gato?”

“Te puede gustar o no Milei y su gestión política, pero es una persona que siempre se mostró muy amorosa con los animales”, insiste Lucía.

Me sentí bastante discriminada, más que nada encasillada en un estereotipo que ella se imaginó. Me preocupa que haya una persona que transita gatos y que ponga filtros políticos para decidir si una persona puede adoptar o no. Me parece algo delirante”, explica la joven.

Por su parte, desde Silvia Adopciones desmintieron esa versión de los hechos y aseguraron que Lucía y su pareja manipularon la información. Aun así, consultados por Clarín, prefirieron no dar declaraciones ni profundizar en el tema.

Por suerte, el final es felino y feliz. La historia de su frustrada adopción se viralizó y otra persona le ofreció una gatita. “Me quedo con los mensajes buenos que recibí. En un rato me van a traer mi gatita que pude adoptar por otra persona. Así que súper contenta”, cierra Lucía, ahora sí, con ronroneos en el horizonte.

Fuente Clarin