Entrenamiento Neuro-Corporal “NEUROBIKA” ¿De qué se trata?

¿Cómo se da la influencia desde lo emocional a lo físico, en cuanto al desarrollo y génesis de la postura corporal? 

La postura corporal es el resultado de la forma en que en su momento, el niño que todos fuimos se adaptó psico-emocionalmente a las situaciones y dificultades de la vida.

El manejo de las emociones es un factor determinante en cualquier modalidad deportiva. Pero el cerebro esconde más secretos que explican las claves de que un deportista sea mejor a otro, y no sólo por sus cualidades físicas.

Hoy queremos abordar las aportaciones que la neurociencia puede hacer al deporte.

 ¿Qué relación guarda el deporte con el cerebro?

Durante mucho tiempo, tanto atletas como entrenadores se centraban en la adquisición de unos patrones motores y la potenciación de los sistemas óseo-musculares y cardio-respiratorios.

Este paradigma centrado exclusivamente en el cuerpo, afortunadamente cambió y fue ganando terreno la preparación psicológica y mental.

El conocimiento del cerebro, ofrece información sobre qué ocurre cuando tratamos de reaccionar a un estímulo, cuando deseamos coordinar diferentes grupos musculares, o cómo afectan al rendimiento deportivo el miedo escénico, el estrés competitivo, la ansiedad y otras emociones como la alegría o la depresión.

De hecho, la neurociencia ya se aplica en el deporte de alta competición, para comprender la incidencia de diversos factores en el aprendizaje motor, como la fatiga, la sed, la ansiedad, el sueño o el hambre entre otros, y para comprender también la relación entre el cerebro y las posibilidades motrices de nuestro cuerpo.

Durante la práctica deportiva, las regiones más importantes son los lóbulos frontales y el cerebelo, que se encarga de mecanizar las secuencias complejas de los movimientos específicos de cada deporte, envía las señales para que se ejecuten las acciones necesarias. Esto explica que cuanto más se entrene, más fácil resultará recordar los circuitos nerviosos y las fibras musculares necesarias en cada momento.

Por otra parte la amígdala, una pequeña estructura del sistema límbico encargada de regular nuestras reacciones emocionales, juega un papel importante en el rendimiento deportivo, especialmente en momentos de elevada tensión, estrés o fatiga.

 “Neurociencia y deporte siempre han estado unidos pero no se sabía”.

Hasta no hace mucho tiempo los entrenadores y técnicos deportivos habían centrado sus esfuerzos y trabajo en el entrenamiento físico, técnico y táctico del deportista.

Pero ha habido un vacío a nivel mental en el deporte de alto rendimiento. Otras disciplinas han aportado al deporte un gran avance y hay que agradecérselo. Sin embargo la neurociencia aplicada al deporte puede ayudar de forma científica a desarrollar la mente unida al cuerpo de una forma multidisciplinar.

Esta ciencia relativamente joven puede darnos muchas claves para saber qué ocurre en nuestro cerebro y cómo podemos entrenarlo: cuando estamos realizando un movimiento deportivo, cuando queremos coordinar los movimientos del cuerpo en el contexto deportivo, o cuando un deportista se ve afectado su rendimiento deportivo determinados por estados emocionales.

La neurociencia puede aportar en el deporte de alta competición algo tan importante como comprender las causas que hacen que el rendimiento deportivo mejore a nivel corporal y mental, comprender cómo potenciar y como eliminar las interferencias de diversos factores en el aprendizaje motor, mental y físico-emocional. Así mismo la neurociencia aporta claridad para comprender las relaciones entre el cerebro humano y las posibilidades motrices de nuestro cuerpo, relaciones fundamentales que están íntimamente unidas y que se desarrollan en el aparato locomotor del deportista.

Estamos ante una gran oportunidad de desarrollo integral y multidisciplinar donde lo más importante es mejorar al deportista y al deporte de una forma científica, medible y que da resultados. La neurociencia y el deporte se han dado la mano y estarán mucho tiempo juntos.

“Los ojos envían señales al cerebro, que reconstruye la imagen que se tiene enfrente. Una vez está creada esa nueva percepción, el cerebro elabora un plan y envía por medio de receptores nerviosos una serie de órdenes a los músculos”.

LA SALUD VISUAL EN EL DEPORTE

“La actividad física influye positivamente en la salud de nuestros ojos”.

Las habilidades motoras están conectadas neuronalmente con el movimiento, la coordinación y la sincronización mente-cuerpo. Cuando la visión está binocularmente sincronizada y bien coordinada, los dos lados del cuerpo funcionan de forma armónica y simultánea.  La percepción al estímulo que se elabora por lo que se ve, va a generar que se realice la tarea o acción en “función de la información que se interpreta”, logrando así generar un patrón de movimiento;  el patrón habita previamente en el cerebro sobre el tipo de movimiento que se requiere realizar.

Son patrones de movimientos inconscientes que están pre-establecidos anteriormente por la información almacenada en el cerebro, es un movimiento reflejo automático e involuntario (conducta) del mismo modo, el movimiento motor (ejercicios) que se adquiere en cualquier deporte estimula este tipo de conexiones binoculares y la transferencia de información a ambos lados del cerebro.

La práctica deportiva aporta a nuestro organismo equilibrio, la base de la bilateralidad (información analizada por ambos hemisferios), ambos hemisferios tienen que tener una información compartida, armónica y equilibrada, la sincronización de tal información debe ser perfecta porque la velocidad a lo que se analizan las imágenes que percibimos, para saber qué significan se logran en gran velocidad, para luego dar respuesta a ese estímulo.

El deportista tiene una amplitud de campo ligeramente superior al que no lo es, el mantenimiento de esa amplitud de campo se logra con la estimulación y la movilidad perceptiva a nivel periférica, esto se estimula y se ejercita con el movimiento y el tono que produce cualquier ejercicio.

A través de los ojos, nos entran casi el 90% de la información que procesa nuestro cerebro, se le llama un trocito de cerebro que está por fuera del cráneo.

(LOS OJOS TIENEN MEMORIA)… AGUDEZA PERCEPTUAL!!!

Los ejercicios de Neurobika que realizamos en @ciemec, fueron creados a partir de los estudios de las Neurociencias más investigadas acerca del cerebro. El resultado es poderoso, de gran efectividad, consiste en actividades orientadas a la preparación del cerebro y la totalidad del sistema nervioso para su rendimiento óptimo deportivo, cada ejercicio estimula y activa determinadas áreas del cerebro. Es importante contar con un buen manejo de la lateralidad, que es la comunicación fluida entre los dos hemisferios cerebrales, es de suma importancia en un deportista cuente con esta capacidad ya que tiene que estar un 100% concentrado,  de esa manera estar presente en su competencia, encontrar la estrategia adecuada, poder emplear lo conversado con su entrenador y mantener su sistema libre de toda distracción.

Al mejorar la lateralidad a través de los ejercicios de Neurobika, la comunicación entre los dos hemisferios cerebrales favorece además, el movimiento del ojo para la visión binocular, para el procesamiento de la información visual, auditiva, coordinación mano, ojo y pie para facilitar las actividades de sentido de orientación. Por lo tanto, este entrenamiento específico permite al atleta estar conectados con sus sentidos, facilitando la percepción a los estímulos que lo rodean, permitiéndole sostener un elevado nivel de concentración en la actividad o deporte que esté realizando!!!

Todo aprendizaje nuevo, requiere de la habilidad de darse cuenta y ser consciente, NOTAR, es el proceso de enfocar nuestra atención en el presente y prestar atención en cómo hacemos lo que hacemos. No hay habilidad más importante para adquirir que la propia experiencia de darse cuenta, NOTAR, hace posible volvernos conscientes de nosotros mismos y tomar decisiones dirigidas a raíz de lo que pensamos, sentimos y hacemos. Dejando al Ser en manifiesto de su Hacer…

Como siempre decimos desde nuestro Centro,  “No hay cuerpo imposible, sino  mente incapaz”…

·         Malvina Mierez – Ricardo Labrone: Neuro-Entrenadores de Grupo Ciemec

·         (@grupo.ciemec)